Audi Aicon: el futuro (autónomo) está en Frankfurt

"El sedán de lujo autónomo del futuro". Eso dicen.

Estudio de diseño, muestra de tecnología, un concept dedicado a la movilidad… todo esto es el Audi Aicon, que explora “cada posibilidad ofrecida por un sedán de lujo autónomo del futuro”. Sí, eso anuncia el comunicado de prensa. Te has quedado roto, confiésalo.

Este 2+2 de cuatro puertas da un salto hacia delante con sus líneas, que enseñan en el Salón de Frankfurt 2017 cómo serán los coches en las próximas décadas. Presume de tecnología a raudales, con innovaciones en el tren de rodaje, la suspensión y la digitalización. El concept Audi Aicon es un visionario.

En cuanto a la movilidad del mañana que propugna, este prototipo deja ver las ventajas del transporte individual de puerta a puerta, que mezcla con el ambiente lujoso de una cabina de avión de primera clase. Pero hay una diferencia sutil (o quizá no tanto): este puesto de mando no tiene volante o pedales, lo que permite ofrecer todo el confort de las comunicaciones electrónicas modernas y una ergonomía perfecta. De lujo.

Al crear el Audi Aicon se ha puesto especial énfasis en el diseño. Es imposible ignorar la presencia de este prototipo, cuyas líneas dejan entrever el espacio interior y la comodidad destinada a los pasajeros. Por sus medidas (5,44/2,10/1,50 m) se colocaría en el segmento D, pero una batalla de 3,47 m, 240 mm más que la versión larga del nuevo Audi A8, proporciona una gran amplitud en el habitáculo. Esa impresión se afianza con las enormes superficies acristaladas delantera y trasera.

Por supuesto, la marca no se olvida de su herencia deportiva, de ahí las llantas de 26” y las ruedas colocadas en los extremos. En el frontal, la parrilla hexagonal Singleframe invertida nos indica que estamos ante un integrante de la próxima generación de coches eléctricos de Audi. No hay faros convencionales, sino displays digitales en la superficie de la carrocería, con cientos de píxeles triangulares que pueden mostrar infinidad de gráficos, no sólo las típicas luces diurnas. Imagina las posibilidades de personalización o los avisos que podría dar a ciclistas y peatones. Además, unos proyectores iluminan la carretera y sus alrededores en alta resolución y dibujan señales en el suelo; así se ‘comunica’ con su entorno. Oh, y no deja que sus pasajeros se aventuren solos en la oscuridad: un mini-dron con un flash alumbra su camino… literalmente.

Hablando de los ocupantes, en el Audi Aicon encontrarán puertas enfrentadas para entrar de forma más cómoda en un interior espacioso. Los asientos no se deslizan sobre raíles, sino mediante una plataforma que también actúa como reposapiés. Oh, y si llevan equipaje, pueden repartirlo en los 660 litros que suman dos compartimentos, uno en el frontal y otro en la zaga del vehículo.

¿Por qué este Audi Quattro es un chollo: tiene trampa?

Sin volante, pedales o controles, un display en el área de las puertas muestra diversos parámetros ajustados a los pasajeros, a los que reconoce mediante su teléfono móvil. Todo es táctil o se maneja mediante la voz, los gestos o el movimiento de los ojos. Puedes navegar en la red, ver una película o tu serie favorita o realizar una videoconferencia. El panel del techo no será una fuente de reflejos, ya que se oscurecerá en función de la luz solar si así lo deseas.

Por supuesto, es autónomo: Audi asegura que este prototipo puede viajar a una velocidad constante de 130 km/h (si vas a realizar un trayecto largo), sin molestas (¿ejem?) aceleraciones y frenadas. Sus avanzados sensores evitarán accidentes, por lo que sus ocupantes no necesitarán los sistemas clásicos de sujeción, experimentando una sensación de libertad.

El Aicon, con tracción total, se mueve mediante cuatro motores eléctricos que producen 350 CV y 550 Nm; su autonomía ronda, según sus responsables, los 800 km. No necesita un humano para recargarse: es posible hacerlo de forma inalámbrica en alguna de las zonas habilitadas para ello, aunque un sistema de carga rápida te permitirá enchufarlo y tener listo el 80% de su batería en menos de 30 minutos. Todo esto se completa con un sistema de suspensión y dos ejes direccionables que garantizan la máxima comodidad a la hora de que los pasajeros sean llevados a su destino. Así ve Audi el futuro. Es lujoso, sí. Y un poco aburrido.