El GP de Miami de Fórmula 1 se pospone al menos hasta 2020. Así lo han comunicado los dueños del negocio, Liberty Media, al afirmar que la cita en Florida no estará presente en el calendario de la Fórmula 1 de 2019.

"En los últimos meses hemos trabajado conjuntamente con la ciudad de Miami y el promotor del evento, Stephen Ross, y hemos avanzado mucho. Sin embargo, la dificultad de las negociaciones obliga a que, con el fin de ofrecer el mejor espectáculo a los aficionados, escuderías y pilotos, (el Gran Premio) no se celebre en 2019", ha explicado Sean Bratches, director comercial de la compañía. 

Algunas fuentes insinúan que el GP de Miami de F1 se pospone al menos hasta 2020 por cuestiones relacionadas con los niveles de ruido que deberían soportar los habitantes próximos al trazado. Es decir que algunos residentes estarían supuestamente  preocupados por los decibelios que deberán soportar durante la competición deportiva.

En ese sentido, la F1 ha insistido que quieren ofrecer el máximo confort a los habitantes de la ciudad norteamericana, por lo que resulta más adecuado retrasar la primera edición del GP de Miami de F1, en principio, hasta 2020.

Para ir abriendo boca, el Gran Circo celebrará el próximo mes de octubre una exhibición en las calles del estado de Florida. Esperamos que el evento obtenga la repercusión y éxito esperados para darle el empujoncillo final a la que sería segunda cita en Estados Unidos junto al GP que se disputa en Austin, Texas.

Primer acuerdo

El pasado mes de mayo, la Comisión de la Ciudad de Miami ha dado luz verde a las negociaciones con la Fórmula 1 para celebrar una carrera de este deporte en sus avenidas. Por tanto, tras votación unánime en favor del GP de Miami de F1, éste se acerca.

El acuerdo con los dueños del Gran Circo, Liberty Media, se cerraría tras el verano. Sí amigo, podemos tener fumata blanca en menos de tres meses. El pacto, que tendría una duración mínima de diez años, arrancaría en 2019. El trazado urbano discurriría por las inmediaciones del puerto de la urbe del estado de Florida.

         (Imagen: Googlemaps)   

El alcalde de la metrópoli, un tal Francis Suárez, ha afirmado que se trata de un gran paso de cara a conseguir la celebración de una prueba de la Categoría Reina. El regidor, ejerciendo su papel de lo políticamente correcto, ha manifestado que ya trabajan con la F1 para solucionar las cuestiones de tráfico y contaminación acústica que pueda plantear el evento. En principio, el nombre de la carrera sería Formula 1 Miami Grand Prix y se celebraría en octubre, entre las citas de Austin y México. El circuito urbano se extendería por el área del puerto. 

Doble objetivo: USA y Sudamérica

Los planes de expansión de los capataces yanquis de la Categoría Reina pasan por impulsar su crecimiento en el mercado local. Recuerda que en Norteamérica solo están presentes en Austin y en Montreal (Canadá). Vale, por el sur también se compite en México. 

Resulta evidente que la ubicación geográfica de Miami, próxima a América del Sur, juega a favor de su candidatura por un doble motivo. Por un lado, los dueños del chiringuito piensan que muchos habitantes de esa zona del mundo podrían viajar hasta la ciudad del estado de Florida para asistir al sarao deportivo. Hay que recordar que aquel subcontinente -más de 10 países y 400 millones de habitantes- solo alberga una cita en el calendario, el GP de Brasil de F1.

Y por el otro, el GP Miami F1 les permitiría potenciar la presencia de la Categoría Reina en su país con una segunda carrera junto a la de Austin (Texas). Así las cosas, Liberty media mataría dos pájaros de un tiro. No está nada mal la idea, al menos en la teoría.

Imagen principal: Averette vía Wikimedia Commons.