Una banda roba más de 100 Jeep usando el software oficial de la marca
La introducción de la tecnología digital en el sector de la automoción nos ha traído a los usuarios una inmensa cantidad de ventajas: los coches cada vez son más cómodos, sencillos de conducir y seguros. Pero también más vulnerables a que alguien con vastos conocimientos de informática haga lo que no debe: una banda de Estados Unidos roba más de 100 Jeep hackeándolos.
Para perseguir ladrones: Los mejores coches de policía del mundo
Lo que has leído: puedes ir olvidándote de la figura tradicional del ladrón de coches. Ahora traspasar todas las barreras de seguridad de tu vehículo es tan fácil como saber dónde hay que tocar para que sistema antirrobo entregue a los amigos de lo ajeno toda la información necesaria para hacer desaparecer el automóvil. Y en el grupo FCA -el gigante del motor Fiat Chrysler Automobiles- lo saben bien: una banda de Estados unidos logró robar más de 100 Jeep hackeándolos. Y 30 de ellos se los llevaron en una sola noche -sé que parece el argumento de 60 Segundos, pero no-.
¿Cómo lo hacían? Muy sencillo -bueno, sencillo, no-: los delincuentes, con acceso al programa DealerCONNECT destinado a la consulta de información relativa a los vehículos de FIAT y Chrysler, introducían en la base de datos el número de bastidor de su objetivo. Una vez en el sistema, hacían creer al coche que contaban con los permisos necesarios -al hacerse pasar por un taller autorizado- para poder arrancarlo sin tener la llave codificada del usuario, y posteriormente lo hacían desaparecer.
Los robos solían tener lugar a altas horas de la noche y la mayoría se concentraron en las inmediaciones de Houston -Texas-, desde donde pasaban al otro lado de la frontera mexicana para dar salida a los coches en el mercado negro. La clave para resolver el caso vino de la mano del vídeo que puedes ver encabezando este artículo, donde se puede observar el proceso mediante el cual los ladrones sustrajeron un Wrangler, uno entre los más de 100 Jeep robados en Estados Unidos mediante la técnica del hackeo.
Ahora entiendo esta oferta de trabajo tan curiosa de FIAT... Está claro que la tecnología que incorporan los coches es insustituible para la mayoría de conductores. Pero yo prefiero quedarme con mi antiguo Porsche 924 de 1985. Te reto. Te reto dos veces a que encuentres el cortacorriente oculto. Si lo logras, es tuyo. Y no le vayas a poner 95...