No son las tres 'B' del bueno, bonito y barato, pero sí són las de BYD, que igual te podrían servir. La marca automotriz china aprovecha el desconcierto general en Europa, sobre todo en precios elevados, para lanzar productos atractivos de vehículos eléctricos. Su próximo proyecto será el BYD Dolphin, un eléctrico que, aunque aún no ha llegado al Viejo Continente, deja posos atractivos.

Este utilitario de la compañía asiática tiene unas buenas dimensiones para su segmento: 4,07 metros de longitud, 1,77 metros de ancho y 1,57 metros de alto, con una distancia entre ejes de 2,70 metros. Es de similares características al Opel Corsa-e (4,06 m), al Peugeot e-208 (4,05 m) o al Renault ZOE (4,09 m), entre otros. Eso quiere decir que podría plantarles batalla a cada uno de ellos.

Pero si hay algo en lo que se aventaja este coche de BYD es en el precio, que será muy competitivo cuando aterrice en tierras europeas. En el mercado chino parte desde 15.750 euros para la versión de acceso y 18.450 euros para la versión más potente, según el cambio de moneda actual. En Europa, actualmente, sólo el MG4 se le aproxima, con un precio inferior a los 20.000 euros.

El Dolphin 2023 se ha fabricado cimentado en una plataforma eléctrica 3.0 de su propia marca. Su gama mecánica se dividirá en dos ofertas y una misma batería (BYD Blade), con celdas de litio-ferrofosfato (LFP) y 44,9 kWh de capacidad. Esta pila está preparada para aceptar carga rápida en corriente continua a un máximo de 60 kW.

Si abrimos el capó de las dos variantes, veremos un motor síncrono delantero de imanes permanentes con dos niveles de potencia. El primero tiene 70 kW (95 CV), 180 Nm de par. Homologa 420 kilómetros de autonomía en ciclo CLTC, sin saber cuál será su homologación en el WLTP de Europa, si bien podría sobrepasar los 350 km. El 0 a 100 km/h lo logra en 10,9 segundos.

Aun hay otra referencia más potente, que eroga 130 kW (177 CV) de potencia y 290 Nm de par. Como tiene más caballos su aceleración de 0 a 100 km/h la hace más rápida, en este caso en 7,5 segundos. Pero tiene como contraprestación que pierde rango entre cargas: según la marca china, tiene 401 kilómetros de alcance en su ciclo de origen.

En su interior vemos una pantalla táctil de 12,8 pulgadas para el sistema de infoentretenimiento, cuadro de instrumentos digital con pantalla de 5 pulgadas o asientos delanteros calefactables, entre elementos destacados.

A falta de que se confirme oficialmente, los rumores apuntan a que el delfín de BYD aterrizará en nuestro continente este mismo año. Pero es probable que con los aranceles y demás burocracia europea sea más caro de lo que vale en China.