Mercedes SLR Stirling Moss: ¡homenaje a un gran coche y un gran piloto!

Mercedes SLR Stirling Moss
¡Uno de los superdeportivos más especiales de la historia!

El Mercedes SLR Stirling Moss lo tiene todo para ser uno de los coches deportivos modernos más especiales jamás creados en el Siglo XXI. Un concepto único en su tiempo, con una historia espectacular, máxima exclusividad y un precio inalcanzable. Nació clásico y nació como homenaje al gran piloto Sir Stirling Moss. Esta semana nos ha dejado, por lo que es el mejor momento de recordar esta joya y recordar el hito en el cual se inspira.

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El Mercedes SLR fue un coche especial, ya que lo hicieron a medias entre Mercedes y McLaren. Una combinación que hoy nos sonaría a chino, pero que a comienzos de siglo era algo normal. ¿Por qué? Ambas marcas ya eran buenas compañeras en la Fórmula 1, por lo que cuando Mercedes decidió fabricar un hiperdeportivo para plantar cara al Porsche Carrera GT y al Ferrari Enzo, tuvo claro a quien debía acudir.

Por su parte, McLaren tenía claro que antes o después empezaría a fabricar coches de calle. El negocio estaba encima de la mesa y solo hacía falta lanzarse a por él. Sin embargo, empezar de cero no sería fácil, por lo que para McLaren era una oportunidad de oro no solo participar en el desarrollo de un hiperdeportivo con la estrella en el frontal, sino que además iba a poder fabricarlo en sus instalaciones.

Sí, el Mercedes SLR fue fabricado por McLaren en Woking, por lo que se podría decir que es el antecesor del McLaren P1, aunque las diferencias entre uno y otro son tantas que esa afirmación se debe coger con pinzas. El SLR tenía un marcado carácter GT, con un gran V8 sobrealimentado con 626 CV y un diseño tan elegante como afilado. Una flecha plateada para rememorar el espíritu del mítico Mercedes 300 SL.

En busca de más deportividad

Sin embargo, el Mercedes SLR era un coche que, comparado con el Enzo o el Carrera GT, se quedaba muy corto en cuanto a efectividad y comportamiento deportivo. El 300SL era un coche lujoso y refinado, pero también era lo mejor de lo mejor en cuanto a comportamiento. Mercedes, pero sobretodo McLaren, se dio cuenta y decidió radicalizarlo un punto más con la versión 722.

Sin embargo, la historia de Mercedes y de su 300SL es impresionante y rápidamente llegaron a una conclusión: la máxima expresión de aquel modelo era el fantástico Mercedes 300 SLR con el que Stirling Moss y Denis Jenkinson ganaron la Mille Miglia de 1955. Una de las victorias más épicas que se recuerdan: Moss era tan loco de los coches que después de terminar la prueba no tuvo problemas para seguir conduciendo hasta Colonia, para llevar a su novia.

Mercedes SLR Stirling Moss

La gesta de Mercedes fue impresionante y dio mucho prestigio a la marca, por lo que si se quería radializar al máximo el concepto del SLR, esa podría ser una gran base: mataban dos pájaros de un tiro, por un lado ofrecían un producto innovador y espectacular, con un gran valor añadido para sus mejores clientes, y por el otro homenajeaban una de las mayores gestas de Mercedes.

Mercedes SLR Stirling Moss

El Mercedes SLR Stirling Moss fue una creación del incipiente departamento MSO, McLaren Special Operations, y fue fabricado de manera completamtente artesanal. Se trataba de una versión inspirada en el 300 SLR de la Mille Miglia, una barchetta sin parabrisas, sin techo, súper estilizada y mucho más radical que el SLR normal. Su aspecto era sencillamente espectacular.

Stirling Moss completó los 1.600 kilómetros de la Mille Miglia en 10 horas, 7 minutos y 48 segundos, con una velocidad media por encima de los 150 km/h. ¡En 1955! Por supuesto, el nuevo modelo tenía que ser rápido y súper eficaz. Su motor contaba con la misma especificación que en el 722, eso son 650 CV y una aceleración de cero a cien en 3,5 segundos. Su velocidad máxima era de 249 km/h, ¡sin parabrisas!

Mercedes SLR Stirling Moss

Su carrocería estaba fabricada íntegramente en fibra de carbono y su diseño era espectacular. Su largo capó y sus jorobas tras el habitáculo recordaban al 300 SLR. También lo hacían las salidas de escape justo por detrás del eje delantero. ¡Incluso las pequeñas puertas con apertura vertical eran similares a las del concepto inicial!

Solo se fabricaron 75 ejemplares del Mercedes SLR Stirling Moss y sus mejoras también alcanzaron elementos como la aerodinámica. Todos los ejemplares contaban con una placa de aluminio con la firma del piloto junto al pomo del cambio. ¡Buen detalle! Sin duda, estamos ante uno de los deportivos modernos más espectaculares. El precio del Mercedes SLR Stirling Moss era de 750.000 euros. ¡A día de hoy supera los 2,5 millones de euros! Un clásico desde el mismo instante en que nació.