A pesar de que ahora mismo existen compactos deportivos realmente interesantes como el Seat León Cupra 2017 y sus rivales, siempre hay ciertas personas que necesitan ir un paso más allá. ¿Conoces el lema ‘built, not bought’? Viene a significar que es mejor crear con tus propias manos tu monstruo que comprarlo hecho... para poder destrozarlo a gusto, si es tu deseo. Así revienta el motor de un Civic de 500 CV durante una lanzada en un banco de potencia. Y el resultado es espectacularmente doloroso. Avisado queda todo el mundo.

Sigamos con la destrucción: así explota un disco de freno

¿Qué te ha parecido lo que acabas de ver? Sé que ahora mismo tienes un nudo en el estómago... y es totalmente normal. Aunque la idea de pasar del Honda Civic Type R 2017 y comprar un modelo de la quinta generación -conocido en el mundillo como EG- para potenciarlo al gusto no parece tan terrible, todo puede torcerse cuando los responsables del proyecto tienen pocas luces. Además de no haber colocado un ventilador que diera aire fresco al motor al trabajar a esas revoluciones en parado, ninguno cae en la cuenta de que por los bajos del coche comienza a aparecer un humo más sospechoso que un Citroën C5 gris aparcado en el arcén de la autovía. Era la señal inequívoca de que algo terrible iba a suceder. 

Sé lo que estás pensando: para creado algo tan brutal como el Honda S600 con 1.200 CV hay que tener un poco más de experiencia. Y yo añadiría que un poco más de inteligencia, también. Así revienta el motor de un Civic de 500 CV. Y la NASA todavía está intentando encontrar la cabeza del pistón en la estratosfera.