Ya se ha dado a conocer el nuevo Citroën C4 X, el último lanzamiento de la marca francesa que, al igual que sucedió con el C5 X, llega para desmontar la habitual clasificación de segmentos a la que ya estábamos acostumbrados. Con este modelo, Citroën mezcla a las berlinas de tres volúmenes con los SUV. ¿Será una buena combinación?

Independientemente del resultado, lo cierto es que es una configuración peculiar que repite en cierto modo lo visto en el Peugeot 408. Aun así, en este caso hablamos de un modelo de 4.600 mm de largo, 1.525 mm de alto y 1.800 mm de ancho en el que se ha primado la aerodinámica. Así lo señalan, al menos, desde la marca.

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Citroën C4 X (4 imágenes)

De esta manera, el diseño del Citroën C4 X hace que el coeficiente aerodinámico de este modelo sea de 0,29. Esto es así gracias a elementos como un frontal con líneas muy redondeadas, el cual tiene un estilo muy similar al visto en el C5 X. Seguimos así por el lateral, donde destacan los Airbump inferiores y los pasos de rueda en negro.

Esto último recuerda en cierto modo a los SUV y lo mismo sucede con la línea del techo, que sigue unas reglas similares a las de algunos todocaminos coupé. No obstante, zonas como el maletero -de 510 litros- están más marcadas que en este tipo de coches, llegando a asimilarse más a modelos actuales como el C-Elysée.

Por dentro, en busca del confort

Es más, este podría ser un buen sustituto para este modelo, ya que sigue algunas de sus claves, pero en una versión más actualizada. Esto se hace más evidente al adentrarnos en el interior del C4 X, que sigue el estilo del C4 y el C5 X. La disposición es la misma, pero destacan cuestiones como los asientos Advanced Comfort, con una espuma especial de 15 mm de grosor.

Esto se combina además con los Amortiguadores Progesivos Hidráulicos de la marca francsa, que trabaja de manera variable en función de lo necesario. Es esto lo que debería aportar ese toque adicional de comodidad tan importante en las largas distancias.

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Interior del Citroën C4 X (4 imágenes)

Eso sí, también la tecnología tiene protagonismo en el habitáculo. En el salpicadero está la pantalla de 10” del sistema MyCitroën Drive Plus, que se puede controlar además mediante órdenes de voz, con una función disponible en 20 idiomas. Desde aquí se manejarán aspectos como la radio, la conectividad con smartphone y el GPS, con mapas TomTom Over-The-Air.

Esta tecnología para los ocupantes se sumará también a la de conducción, con funciones cmo el freno de emergencia o la alerta de riesgo de colisión. Asimismo, sistemas como el Highway Drive Assist y el Control de Crucero Adaptativo con Stop & Go se dedicarán a hacer más amenos los viajes.

Con versión eléctrica y motores de combustión

Finalmente, en lo referido a los motores del Citroën C4 X, encontraremos propulsores de combustión y eléctricos. Eso sí, en 14 mercados solo se ofrecerá la segunda opción. En nuestro caso, podremos optar por una versión eléctrica y tres bloques térmicos.

En el primer caso se encuentra el Citroën ë-C4 X, que será un coche eléctrico con 100 kW de potencia -136 CV- y un par máximo de 260 Nm. Montará además una batería de 50 kWh que permitirá contar con una autonomía de hasta 360 km, mientras que la recarga completa se podrá realizar en media hora en un punto de 100 kW.

Por otra parte, en cuanto a los motores de combustión, encontraremos dos gasolina y un diésel. Los primeros serán el Puretech 100 -con una caja manual de 6 relaciones- y el Puretech 130 -con la caja automática EAT8 de 8 relaciones-. El diésel, por su parte, será el BlueHDI 130 también asociado a la transmisión EAT8.

Esto será lo que resuma la oferta mecánica del nuevo C4 X, pero en determinados mercados también se podrá encontrar un bloque BlueHDi 130 Euro 6.4 Start & Stop EAT8. En España, sin embargo, no estará disponible.

Con todo, este nuevo modelo de la marca de los dos chevrones llegará a los concesionarios en otoño de este año y su fabricación se llevará a cabo en España. Concretamente, se ensamblará en la planta de Villaverde, en Madrid. Lo que no se ha desvelado, eso sí, son los precios por los que se venderá.