Motores del Skoda Karoq Sportline: ¿cuál es el más adecuado?

Victor Delgado

Un SUV compacto con un puntito picante.

El Skoda Karoq Sportline es un coche muy atractivo. ¿Por qué? Pues porque reúne una serie de características que le convierten en un modelo perfecto para mucha gente. Es muy genérico. ¿Quieres un vehículo para moverte con tu familia? Pues este Skoda Karoq no tendrá ningún inconveniente en ponerse a ello. ¿Te vas de vacaciones y necesitas un modelo amplio? Ningún problema, le sobra espacio en el habitáculo y en el maletero. ¿Tecnología? ¿Comodidad? Lo tiene prácticamente todo. Y ahora Skoda lo ofrece con este acabado Sportline, que le da un toque más deportivo. Lo que le faltaba.

El mejor de los motores del Skoda Karoq Sportline es...

Lo mejor de todo es que los motores del Skoda Karoq Sportline son prácticamente todos. Quitando los más básicos de la oferta de este modelo, un 1.0 TSI de 115 CV y un 1.6 TDI de la misma potencia, la versión deportiva del Karoq se puede ligar a cualquier mecánica de su gama. Esto implica un 2.0 TDI con potencias de 150 y de 190 CV, un 1.5 TSI de gasolina con 150 CV, y por último otro gasolina, el más potente de este coche, un 2.0 TSI con 190 CV de potencia.

La cuestión más importante es que cualquiera de estos propulsores casa a la perfección con la filosofía del Skoda Karoq Sportline. Es un coche cómodo, muy cómodo. Y amplio. Vale tanto para ciudad como para carretera, y si le instalas una tracción a las cuatro ruedas, algo que se puede hacer en casi cualquiera de las versiones que integran estos motores, también permite salir al campo con ciertas garantías. Además, también puede equipar un cambio automático de doble embrague DSG que destaca por su rapidez y por unas transiciones entre los cambios casi inapreciables.

Skoda Karoq Sportline

En nuestra opinión, la mejor opción si realizas muchos km es el 2.0 TDI de 150 CV. Ofrece un buen empuje y será suficiente por potencia, amén de que consume poquísimo combustible. Aunque si quieres un extra de punch, el 2.0 TDI de 190 CV quizá sea más adecuado para tus intereses y necesidades. No obstante, la gama de propulsores TSI de la firma checa también está muy conseguida en cuanto a consumo, así que a lo mejor te sale mejor optar por uno de gasolina.

Si no realizas un montón de km al año, menos de 15.000 aproximadamente, seguramente debas elegir uno de los TSI, bien con 150 o bien con 190 CV. En este caso te recomiendo optar por el cambio automático, pues la combinación de este con un motor TSI ofrece una gran suavidad. Ahora, la pelota está en tu tejado. ¿Con qué motor del Skoda Karoq Sportline te quedas tú?