Es uno de los SUV más demandados en el mundo premium, has sido el modelo sueco más vendido entre 2009 y 2020 y se ha convertido una alternativa que mira de tu a tu a los Audi Q5 y BMW X3. Sí, hablamos del XC60, que se renueva con una ligera actualización y lo testamos en esta prueba del Volvo XC60 T8 2021.

Y qué mejor que hacerlo con el acabado Polestar, que además de lograr una silueta más deportiva en el exterior, se viste por dentro con detalles tan espectaculares como los cinturones de seguridad en amarillo. No solo son detalles estéticos, porque el chasis esconde una sorpresita de las buenas: una suspensión firmada por Ohlins.

Estos son todos los cambios del Volvo XC60

Ahora la probaremos a fondo, primero te cuento los cambios estéticos del XC60 2021. Ligeros, muy ligeros, pues por fuera se reducen a unos nuevos paragolpes tanto en el frontal como en la trasera y una parrilla delantera más agresiva. Allí sigue siendo protagonista la firma lumínica del martillo de Thor que caracteriza a los coches suecos desde el lanzamiento del Volvo XC90.

Por dentro se mantienen la calidad y los acabados de primera que lo distinguen desde su lanzamiento, con ese orden nórdico donde todo queda a mano sin grandes complicaciones. La pantalla de la consola central sigue siendo una tablet, pero ahora cuenta con un sistema de infoentretenimiento desarrollado por Google. 

Volvo se convierte así en la primera marca que se asocia con el gigante americano y el resultado funciona realmente bien, sobre todo a la hora de ejecutar las órdenes vocales. Se agradece, por ejemplo, a la hora de cargar una dirección en el navegador, donde basta con un decir sencillo "ir a..." y el sistema carga la ruta.

La digitalización se abre paso con ese sistema de Google y con un cuadro de mandos completamente nuevo y digital, donde el conductor puede elegir entre varias vistas para ver más grande la información que se desea en cada momento.

Hora de ponerse en marcha: empieza la prueba del XC60 T8

Repasados los cambios, me pongo en marcha para comprobar el rendimiento de un T8 Recharge que ahora aumenta su potencia y autonomía, ¿Cómo? Pues gracias a una batería mayor (ahora 18,8 kWh frente a los 11,6 anteriores) y a un motor eléctrico que aumenta su potencia hasta los 145 caballos. 

Eso le permite disponer ahora de hasta 90 kilómetros de autonomía y, más importante, se convierte con 465 caballos en el Volvo más potente de la historia. Inicia la marcha en silencio y tanto la suavidad como el confort son sus señas de identidad. Como en todos los XC60. Pero este tiene un punto de tabia, un puntazo más bien cuando hundes el pie en el acelerador.

La suspensión revisada por Ohlins se encarga de mantener las cosas bajo el control, con unos tarados más firmes que contienen los balanceos en cambios de apoyo y una dirección endurecida en la que sientes con fidelidad lo que pasa bajo las ruedas. Me han gustado los frenos, que no sufren fatiga pese al aumento de peso de las baterías.

Eso sí, todo tiene un precio y por el XC60 T8 híbrido enchufable de la prueba, Volvo pide 78.738 euros. Es verdad que es el motor más potente, pues la gama se completa con por PHEV T6, un gasolina de 197 CV y otro diésel de B4 de también 197 CV y que con campa de financiación cuesta 40.300 euros.