No sabías que existía: esta es la historia del Renault 4S Mini

Renault 4S Mini
No, no tiene nada que ver ni con Porsche ni con el Mini británico.

La guerra comercial entre China y EEUU vuelve a recordarnos temas casi olvidados, como los aranceles comerciales entre países y los problemas que pueden ocasionar. Dicen que el ser humano es más ingenioso ante las adversidades y la historia del Renault 4S Mini puede ser un buen ejemplo. ¿No sabes de qué te estoy hablando? Es totalmente normal: se trata de un coche muy peculiar y solamente fabricado en Uruguay: sin duda, uno de los Renault más raros de la historia, un pequeño compacto que sin duda podría estar entre los cinco coches de Renault que nadie conoce.

Su nombre es peculiar: Renault 4S Mini (o Mini 4S). Y no tiene nada que ver con nombres mitificados por otras marcas, como las versiones 4S del Porsche 911 o el mítico Mini Cooper. Su historia es estrambótica, aunque bastante sensata en una zona donde el precio de los coches siempre intenta ser lo más bajos posibles. El Renault 4 es uno de los coches más populares de los años 80: fiable, robusto y fabricado en numerosos mercados. El Renault 4L fue muy popular en Sudamérica, especialmente en Argentina, donde era fabricado por parte de la empresa local IKA: en esta época, los aranceles hacían que los coches fabricados en el propio país fueran mucho más baratos que los coches importados del exterior.

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Esta es el principal motivo del nacimiento del Renault 4S Mini. Uruguay está pegada a Argentina, pero todo los productos producidos en el país vecino sufrían un importante impuesto arancelario cuando se vendían en el mercado uruguayo. El Renault 4 es probablemente el mejor ejemplo, pero la necesidad agudizó el ingenio. La ley local uruguaya afirmaba que un coche solamente estaría exento de aranceles si al menos el 60% del coche se fabricaba en suelo uruguayo. Ojo, ¡no todo el coche debía fabricarse en Uruguay! Solamente el 60%.

¿Solución? La empresa local uruguaya Santa Rosa SA decidió tomarse al pie de la letra esta normativa y decidió desarrollar su propio Renault 4, modificado justo el 60 por ciento para evitar pagar los aranceles de importación. El Renault 4 se fabricaba ‘a medias’ en Argentina y viajaba a Uruguay donde se terminaba de fabricar. El chasis, el motor, suspensión y parte frontal venían ya montadas desde la factoría de Renault en Córdoba, Argentina. Una vez ya en Uruguay, se montaba el resto de la carrocería, interior, etc. Quizás el calculo exacto del 60% no era del todo preciso, pero el caso es que la fórmula fue un éxito y el coche se salvó de los aranceles, siendo el Renault 4S Mini el ‘4 Latas’ más popular de Uruguay.

Ahora bien, el resultado pudo ser un éxito económico para la empresa Santa Rosa SA y para los Uruguayos, que podían comprar un Renault 4 más barato, pero no se puede decir que fuese un éxito estético. Con la nueva trasera, de tipo hatchback y dos puertas en lugar de las cuatro originales el conjunto era peor, en general: las plazas traseras tenían menos espacio y su acceso era peor, el maletero era más pequeño y no se puede decir que fuese más bonito, más bien todo lo contrario. No obstante, consiguió su objetivo y hoy es uno de los Renault más raros que existen sobre la faz de la tierra. ¡No hay mal que por bien no venga!