“Pues que se va a poner de agua hasta arriba”. Seguro que estás pensando lo mismo que yo. Pero lo que está claro es que ésta no es la mejor idea para darse una ducha matutina... Ni tampoco para lavar una motocicleta. Si no, que se lo pregunten a la Yamaha del protagonista de este vídeo.

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Directamente puedes saltarte los primeros segundos para ir al grano y contemplar los efectos del lavado del personaje en cuestión. Seguro que tras verlo se te quitan las ganas -si alguna vez las has tenido (espero que no)- de emular a este motorista. Y es que la acción del agua a alta presión sobre el cuerpo no tiene que ser precisamente como los chorros de un jacuzzi... Más, si redondeas esta idea de bombero vistiendo una simple camiseta... Los latigazos en el cuerpo están asegurados. Al menos esperamos que la moto tuviera buena estanqueidad y no haya sufrido ningún daño debido a la ocurrencia de su propietario.

En fin, como suele decirse, no intentes hacerlo tú mismo en la vida real. Salvo que te falte un tornillo...