Prueba: Seat Ibiza EcoTSI 95 CV

En esta prueba del Seat Ibiza EcoTSI vas a encontrar 95 CV. Ni uno mas, ni uno menos. Y sus cifras no son espectaculares. Porque no todo en esta vida son superdeportivos…

Sé lo que estás pensando. Pero lo cierto es que probar un Seat Ibiza EcoTSI también entra en nuestros planes. No es un superdeportivo, ni siquiera tenemos como excusa su participación en una de esas… ¿carreras? en las que te preocupas por el consumo, no por la velocidad. Simplemente, nos apetecía bajar al mundo real, poner los pies en la tierra. Nos desengrasa, nos acerca a la calle y nos conecta con el universo en el que habitamos, ése en el que la marca tiene puesto (con toda lógica) su objetivo de ventas. Así que, por una vez, nos volvemos ‘mundanos’. Y no está nada mal…

Vídeo: Las generaciones del Seat Ibiza

Muy bien. Y ¿qué tal sienta esta dosis de realidad?

Es extrañamente reconfortante. Verás, entre los motores nuevos que la compañía española ha incluido en su modelo superventas hay uno con tres cilindros, un 1.0 que puede ser atmosférico (75 CV) o turbo (95/110 CV). Nos montamos en el intermedio, con el que este Seat Ibiza pasa de 0 a 100 km/h en 10,8 segundos. Vale, se toma las cosas con calma. Pero no tanta como crees.

Ya veo. Emoción a raudales…

Ten en cuenta que este Seat no busca eso. Lo que quiere es que el consumo y las emisiones sean contenidas. Y si en un uso urbano sólo gasta 5 l/100 km… Es un lujo para una mecánica de gasolina. Sácalo a carretera y esta cifra bajará. No voy a engañarte: no hay aceleraciones fulgurantes ni una ‘patada’ cuando pisas el acelerador. Si dejas que caiga de vueltas, tardará en recuperarse. Y cuando escuches el sonido de su motor, recordarás que hay tres cilindros trabajando. Pero el rumor no es muy acusado. Aprenderás a gestionar el cambio, que cuenta con una palanca de recorridos precisos, para que el propulsor se mantenga siempre en su régimen óptimo. Y sonreirás mientras el resto de los conductores para en la gasolinera.

Así que es posible tenerlo como coche único.

Sin duda. A la aguja le cuesta subir en la escala de revoluciones, pero no es para echarse las manos a la cabeza y, en la zona media, se circula con solvencia: no te va a hacer falta apurar las marchas. Puedes salir de la ciudad con este Seat Ibiza tricilíndrico y volver de tus vacaciones sin que la mayor partida del presupuesto haya sido la dedicada a la gasolina (aunque el consumo real, avisamos, sube respecto al anunciado por el fabricante. Pasa siempre, no te asustes).

Es un coche tranquilo, equilibrado. Nuestra unidad monta la suspensión confort, así que ya imaginarás que los apoyos en las curvas cerradas no son lo suyo -el XDS, que imita el funcionamiento de un diferencial autoblocante, sólo es de serie en los Ibiza con más de 100 CV-, pero la carrocería se sujeta con mucha dignidad, no vas subido en un barco. Frenos y dirección actúan correctamente. No nos exige nada. Aporta relajación.

Ya veo. Todo muy zen…

¿Quieres un poco más de emoción? Echa un vistazo al Seat León Cupra 290.

No exactamente; este Ibiza EcoTSI te deja conducirlo sin ponerte constantemente a prueba. No hay tirones innecesarios, golpes de la amortiguación o un volante contra el que tengas que luchar a brazo partido. Pero tampoco te acuna dulcemente o te aísla del mundo exterior: simplemente, pide que lo lleves y él obedece tus órdenes. Sin un entusiasmo exagerado, pero con eficacia. Ya está. Una vida sin sobresaltos. Para la juerga ya están sus ‘primos’ FR y Cupra; en una familia tiene que haber todo tipo de caracteres…

Supongo que sí. Háblame del interior.

Hay materiales de calidad adecuada al tacto y a la vista, plásticos blandos en el salpicadero, asientos cómodos, un maletero de casi 300 litros muy aprovechable… La vida a bordo es sencilla, tranquila, como en una casa de campo. Pero adaptada a los nuevos tiempos. Conectividad, amigos, es la palabra que buscamos.

Este Ibiza 'Eco' lleva los apellidos Connect Blue, que toma de un paquete opcional. Con este nombre, no podía faltar un sistema multimedia que replicase lo que hay en tu teléfono móvil para que siempre estés cerca de tus redes sociales. Funciona de forma intuitiva y su manejo es sencillo, pero, como siempre apuntamos, la posibilidad de distraerse con las múltiples aplicaciones es alta; mejor restringe su uso a las que sean realmente útiles… Y recuerda que cuesta 750 euros. La unidad probada también contaba con el pack invierno (350 euros), en el que están los asientos calefactables -el día que sean obligatorios será uno de los más felices de mi vida-, el líquido del parabrisas calefactado y, por alguna razón, el ajuste en altura de la banqueta del pasajero. No es muy invernal, pero ahí está.

Mantenimiento

Empezamos por el precio base del Seat Ibiza EcoTSI: 17.080 euros, que es muy razonable. Pero si empiezas a añadir extras, puedes llegar a los 20.510 de la unidad que hemos probado, con navegador, cristales traseros tintados, luz ambiente (esto cuesta 70 euros)… Táchese lo prescindible -es decir, los tres últimos. Al menos, en mi caso- para abaratar su coste.

Se nos vienen a la cabeza tantos competidores que es fácil perderse: Peugeot 208, Hyundai i20, Renault Clio, Kia Rio, Skoda Fabia… Hasta un Seat León entra en la lucha para convertirla en fratricida. Precisamente, su ‘hermano mayor’ es su rival más serio, debido a su comportamiento dinámico. Cosas de familia…

Nuestro veredicto

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