Tiene ya diez años, pero sigue siendo uno de los coches más rápidos del mundo. Señoras y señores internautas, déjenme presentarles un inmaculado Saleen S7 Twin Turbo en color Lizstick Red.

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Se ofrece en subasta a finales de julio en RM Sotheby’s Motor City y querrás prestarle algo de atención. Principalmente, porque… bueno, porque sigue siendo uno de los coches más rápidos del mundo. Llegó como el sucesor del Saleen S7 normal (digámoslo así), pero el S7 TT contaba con un motor 7.0 V8 de aluminio, la pareja perfecta para los dos turbos Garret que tenía asociados.

Una caja de cambios manual de seis marchas mandaba la fuerza al eje trasero. Estaba unida al enorme conglomerado de potencia, montado en posición central. Y qué potencia, amigos. Ofrecía 760 CV y pasaba de 0 a 100 en 2,8 segundos. ¿La velocidad máxima? 400 km/h. Sí. En 2006. Y no hablamos de lo mejor del S7 TT.

Los alerones delantero y trasero son distintos a los del Saleen S7 estándar, junto con un paquete aerodinámico ligeramente rediseñado. De los 13 S7 TT construidos, éste es el último. Se dice que está como salió de fábrica, sólo ha recorrido 480 kilómetros, realizados por sus dos propietarios, y su última revisión ha sido el mes pasado, en mayo de 2016. Tiene hasta la pegatina de las ventanillas original y un juego de maletas.

¿Su precio? Prepara la cartera, porque, como te imaginarás, barato no es… Hablamos de unos 670.000 euros. Es una auténtica ganga para una máquina de alto rendimiento cien por cien americana. Hasta Iron Man tuvo uno en su garaje…