Texto: Stephen Dobie

Ya te hemos hablado en otras ocasiones de este Toyota GT86 de 1.165 CV. Pertenece a Fredric Aasbo, un campeón de drifting (ya te imaginarás por qué cuando le des al play…) que dibujó el logo del modelo haciendo donuts con su vehículo, por ejemplo. El departamento de Marketing de la compañía chocó las manos en señal de aprobación.

Pero eso fue en los seguros confines del campo de pruebas de Millbrook, un espacio en el que puedes ‘expandirte’ sin peligro alguno, ya que hay cómodas escapatorias, diseñadas especialmente para este tipo de comportamiento.

Parece ser que Aasbo lo encontró un poco simplón, le faltaba algo de riesgo. Así que llevó el coche a la Ruta Alpina de Millbrook, diseñada para replicar una carretera de montaña retorcida, bacheada y tortuosa. Se usa para examinar la actuación de los vehículos generalistas y también aparece normalmente en la pequeña y en la gran pantalla.

¡De locos! El motor de un Ferrari 458 en un Toyota GT86.

No es el tipo de sitio que perdone errores. Hay barreras, señales y árboles esperando, listos para golpearte. No es precisamente el lugar más adecuado para un Toyota GT86 con más potencia que un Bugatti Veyron. Pero, como ves en el vídeo sobre estas líneas, allí fue exactamente donde se dirigió Aasbo. Digamos que estás ante la segunda parte de los donuts, pero más emocionante, en nuestra opinión. ¿Qué te parece?