Saluda al Prodrive Hunter Hypercar, un coche del Dakar que salta a la calle
Y tú, pensando en comprar un SUV...
Texto original de Tom Ford
¿Alguna vez has echado un vistazo a la máquina de competición Prodrive BRX Hunter T1+ de Sébastien Loeb y has pensado que sería perfecta para ir a comprar, si pudiera circular legalmente, tuviera un 50% más de potencia y unas pocas pulgadas más de recorrido de suspensión? Nosotros tampoco. Sea como fuere, estás viendo el Prodrive Hunter Hypercar.
Esta es la iteración 'de carretera' del monstruo T1+ Dakar de Prodrive. Sí, ahora puedes comprar legítimamente el coche de la empresa Dakar de Sébastien Loeb para ir a Lidl (hay otros supermercados disponibles), siempre que tengas aproximadamente un millón y medio de euros y tu centro comercial esté al otro lado de unas dunas enormes.
El coche que ves en las imágenes es la primera versión y ha sido fabricado para el Príncipe Salman bin Hamad Al Khalifa de Bahrein. Podemos decir mucho sobre él, pero por ahora nos limitaremos a decir que es una máquina... Bastante seria.
¿Qué obtienes por un millón y medio de euros? Bueno, en realidad te llevas bastante más que el coche base del Dakar. Tiene la misma estructura tubular de los coches de carreras, envuelta en fibra de carbono estructural y el mismo V6 biturbo de 3,6 litros de Ford montado en la parte delantera central (el mismo bloque que usan el Raptor F-150 y el Ford GT).
Además, tiene los mismos ocho juegos de amortiguadores de gama alta, así como neumáticos de 37“ que envuelven unas llantas de 17”. La carrocería también es esencialmente la misma, aunque los clientes pueden optar por cambios si lo desean. Por ejemplo, pueden eliminar el alerón trasero o montar el paquete aerodinámico completo.
Una bestia con toques de comodidad
En resumen, es algo muy parecido a lo del Dakar, pero la versión de carretera es un poco más baja. Además, debe ser más sencillo de conducir, ya que viene de serie con detalles como una cámara trasera. Ya sabes, para que puedas maniobrar sin agobios en tu parking más cercano.
La gran noticia es que, debido a que el Hypercar no tiene que atarse a las restricciones del Dakar, el motor cuenta con más de 600 CV, en comparación con los 400 del de rally. Asimismo, los amortiguadores pueden ofrecer mucho más recorrido si se prefiere. El coche de carretera es el coche de carreras desatado, y no al revés.
Hay toques civilizados, eso sí. En lugar de ruedas de repuesto gemelas montadas en los lados, ahora hay tomas de aire, con una sola rueda de repuesto escondida bajo la trasera. Por otro lado, el enorme depósito de combustible de 500 litros se encoge para hacer algo espacio para llevar equipaje, hay amortiguación de sonido en todas partes y se ha colocado un interior en condiciones.
Esto último se ve bastante bien. Con asientos menos agresivos que en la versión de carreras, es inmediatamente más cómodo para sentarse. También, con una consola central al uso, en lugar de los intimidantes bancos de interruptores del coche de carreras, hay más conexión con un automóvil orientado a la carretera.
Eso sí, no te engañes. Esto esto no está realmente orientado a la carretera: la transmisión, los diferenciales, la suspensión y el motor son exactamente los que encontrarías en el de competición. De hecho, el único cambio real es la palanca de cambios. Incluso conserva la palanca de freno de mano hidráulica e intensamente divertida.
¿Es demasiado? David Lapworth, director de I+D de Prodrive que ha diseñado coches para McRae, Burns y Solberg, dice que aprenderán mucho sobre lo que los clientes prefieran de los primeros coches.
Aunque eso se deberá principalmente a cuestiones de comodidad y comportamiento en carretera. Si el mejor equipo de rallies del mundo ha diseñado el coche, y Sébastien Loeb ha hecho las pruebas de puesta a punto y durabilidad, probablemente estés en el mejor lugar posible desde el principio. Y seamos justos, si te compras un T1+, probablemente esperes algo un poco radical.
También está el punto de que Prodrive espera vender la producción de menos de 20 coches a personas adineradas que viven donde pueden usarlo adecuadamente. ¿Qué quiere decir eso? Lugares con dunas, muchas dunas.
Comprar un coche del Dakar que luego no funcionara en el desierto sería un fracaso, de ahí el hecho de que el Hypercar podrá destruir absolutamente cualquier terreno que le permita ir a toda máquina.
Con 600 CV, tracción total permanente, su recorrido y estructura de la suspensión y el equipo de ensueño Prodrive/Loeb detrás, este es el tipo de cosa en la que podrías pasar unos días de ensueño escalando dunas mientras vas más rápido que los coches de Dakar. Suena divertido, ¿verdad?