El CEO de Ford dice que le sobra gente y le falta talento para saltar a los eléctricos

El CEO de Ford, Jim Farley

Los mejorables resultados financieros obligarán a hacer cambios

La transición a lo eléctrico requerirá de cambios drásticos. Al menos, así lo ve el CEO de Ford, Jim Farley. Según ha señalado, es muy probable que se realice una gran reestructuración de la plantilla de la marca, ya que las divisiones dedicadas a los coches de combustión y a los coches eléctricos están obteniendo beneficios inferiores a lo previsto.

Tal y como han informado nuestros compañeros de Business Insider, Farley apuntó en una conferencia en la sede de la firma de análisis Wolfe Research que no se están cumpliendo algunos objetivos. Según dio a entender, una de las causas es una plantilla demasiado grande, así como la complejidad de ambas divisiones.

El Ford Mustang Mach-E es uno de los eléctricos más importantes de la marca.
El Ford Mustang Mach-E es uno de los eléctricos más importantes de la marca.

Por este motivo, el director ejecutivo de la marca americana señaló que necesitarán “reestructurar talento” en esta transformación del negocio automovilístico. Y es que, tal y como apuntó: “Tenemos demasiada gente. Demasiada inversión. Demasiada complejidad"

A estas palabras, el empresario agregó que "hay mucho foco en la oportunidad de crecimiento digital y eléctrico, pero tenemos mucho margen en nuestro negocio de motores de combustión para ofrecer mayor calidad, menores costes estructurales y una reducción radical de la complejidad". Por ello, Ford realizará una gran inversión para lograr ese objetivo.

Se necesitará nuevo personal

Aun así, el cambio no solo pasará por reducir la plantilla. Según Jim Farley, “el talento dedicado a los motores de combustión y el de los motores eléctricos es diferente". Por ello, será necesario contar con trabajadores que posean otras habilidades especializadas en esta tecnología. 

Otra opción es adaptar al personal ya contratado a la producción de los eléctricos, pero tampoco es una tarea sencilla: "Los trabajadores de producción necesitan entre 6 y 8 semanas para aprender un nuevo trabajo. Los ingenieros y los técnicos son otra historia", agregó.

Para el responsable de la marca estadounidense, esto supone ahora mismo “la mayor preocupación de la industria, que es muy competitiva". De hecho, General Motors ha pasado por una situación similar, llegando a cerrar fábricas y a despedir a trabajadores.

Por lo tanto, parece que la solución pasará por reducir el personal y contar con nuevo personal especializado en los coches eléctricos, ya que es necesario impulsar este tipo de vehículos. Eso sí, tanto estos como los de combustión seguirán formando parte de la oferta de la marca por el momento.

Etiquetas: Motor