Supongo que a nadie le extraña pensar que es algo muy sofisticado pero, ¿sabes cómo funciona la aerodinámica del Porsche 911 Turbo S exactamente? Pues para entender el tan afilado comportamiento de este Porsche 911, es fundamental indagar un poco en ella. 

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Verás que sobre el papel -o la pantalla, mejor dicho- es muy sencillo, pero primero, debes familiarizarte con este término de Porsche: Porsche Active Aerodynamics (PAA), o lo que es lo mismo, la aerodinámica activa de Porsche. 

A grandes rasgos, esto influye en la aerodinámica activa del Porsche 911 Turbo S de una manera muy práctica: adaptando las características aerodinámicas del vehículo de manera todavía más precisa a la situación de conducción, velocidad y modo de conducción seleccionado. 

Pero claro, la magia no existe y en este proceso lo que en realidad cuentan son elementos como las aletas de enfriamiento de aire, que actúan como un tercer componente de aerodinámica activa, junto al labio delantero y al alerón trasero extensible e inclinable. 

A su vez, estas permiten -además de las básicas PAA Speed y PAA Performance- una configuración aerodinámica Eco que funciona de la siguiente manera: ubicadas en las entradas de aire derecha e izquierda del faldón delantero, las aletas, que se ajustan continuamente, permiten una menor resistencia a la conducción y, por tanto, un menor consumo de combustible. 

A partir de 70 km/h y hasta 150 km/h, permanecen cerradas y desde ahí, se abren para conseguir el mejor equilibrio aerodinámico cuando se circula a velocidad elevada. Para que te hagas una idea, su peor coeficiente aerodinámico, con todos los elementos inactivos, es de 0.33. El mejor valor de algunos deportivos es de 0.24... Imagínate lo que es capaz de hacer con toda la artillería en marcha.

La aerodinámica del Porsche 911 Turbo S: un trabajo 24/7

Si hasta aquí, el funcionamiento de la PAA de Porsche en el Porsche 911 Turbo S te ha parecido impresionante (te aseguro que lo es), debes saber que su papel no se limita solo a esa función… Por ejemplo, a través del ‘Wet Mode’, permite también mover el equilibrio aerodinámico hacia el eje trasero para mejorar la dinámica y seguridad en asfalto mojado.

Además, es capaz de influir en los frenos, ya que es capaz de -ante frenadas a gran velocidad- utilizar el aire para detener el vehículo, produciendo una mayor resistencia y mayor carga aerodinámica en este caso (lo que reduce mejora su distancia de frenada cuando se lleva a cabo una conducción más dinámica).

Y por último, pero no menos importante, contribuye a mejor el flujo de aire alrededor del vehículo cuando hablamos del Porsche 911 Turbo S descapotable. Es decir, diferentes comportamientos, en diferentes situaciones, pero con el objetivo de conseguir siempre la mejor respuesta. Aquí puedes leer la prueba del Porsche 911 Turbo S para comprobarlo por ti mismo.