Magnus Walker reúne en un documental a las generaciones del Ford GT

Las 3 versiones históricas del Ford GT , reunidas en Willow Springs

El famoso coleccionista y conocida personalidad del mundo de los coches deportivos, Magnus Walker, ha terminado su serie The Big Thing junto a la productora Hagerty Media en su canal de YouTube con un espectacular capítulo. El aficionado a Porsche reunió en el Circuito de Willow Springs, ni más ni menos, que a todas las generaciones del Ford GT.

Este es Magnus Walker: uno de los mayores coleccionistas de Porsche 911 del mundo

El mayor triunfo de la historia de Ford se debe indudablemente al Ford GT40 original, con el que Carroll Shelby consiguió batir a Ferrari en las 24 Horas de Le Mans e inaugurar una saga de décadas con uno de los superdeportivos más espectaculares del mundo.

Un momento especial junto al Ford GT40 original

Tres Ford GT40 en la meta de Le Mans, 1966.
Tres Ford GT40 en la meta de Le Mans, 1966.

Magnus Walker crece cada día más dentro de la comunidad internacional de automoción, y uno de los momentos más importantes para el británico ha ocurrido en este documental. Tras más de 40 años de vida, por fin pudo subirse a un Ford GT40. Pero no a cualquier versión o réplica: se trata del GT40 MK.3 de 1967, uno de los cuatro restantes (de siete unidades construidas) para la calle.

Basado en el coche de carreras, cuenta con una carrocería un poco más larga, suspensiones más blandas que las de circuito, un motor descafeinado y algún que otro detalle interior en pos de la comodidad. Su motor V8 289ci de 4,7 litros atmosférico genera 310 CV a 6.000 rpm y 446 Nm de par máximo.

Aunque su ADN del mundo de las carreras está intacto: solo pesa 997 kg en vacío, que junto a una transmisión manual de 5 velocidades lo lleva a pasar de 0 a 100 km/h en solo 5,3 segundos. Todo un logro para la época que no deja de brillar hoy en día.

Carroll Shelby: el hombre que cambió la historia de Ford

El coche forma parte de la colección del Petersen Automotive Museum, y está valorado en más de 5 millones de dólares, por lo que es todo un logro que lo dejasen en manos de Magnus Walker para grabar el documental recorriendo el Circuito de Willow Springs. Aunque no duró demasiado, porque tuvo un problema mecánico que dejó tirado al piloto... Cosas de coches clásicos.

Y hablando de clásicos, la pista de Willow Springs era el mejor lugar para conducir estas bestias, porque fue allí donde Carroll Shelby y el famoso piloto Ken Miles pusieron a punto la primera versión del Ford GT40, antes de lanzarse a la conquista de las 24 Horas de Daytona, Sebring y Le Mans más tarde.

De los clásicos a las versiones modernas

Ford GT de segunda generación.
Ford GT de segunda generación.

Tras probar el Ford GT40 original, Magnus Walker hizo lo propio con sus herederos: los Ford GT del 100º aniversario y la última versión EcoBoost. La segunda generación siguió unas líneas similares de carrocería con una mecánica de última generación que alzaron aún más el nombre de Ford.

Esta versión debutó en 2003 en el Detroit Motor Show y fue obra del diseñador Camilo Pardo, a quién Magnus Walker tiene el honor de entrevistar en el documental. Su desarrollo no fue nada fácil, con el objetivo de crear un coche moderno que no dejase atrás la herencia del Ford GT40 original.

Pardo asegura que gran parte del trabajo sobre ese Ford GT tuvo su inspiración en el Lamborghini Miura, un clásico con unas líneas únicas que Lamborghini no ha abandonado en todos sus años, sino que ha ido evolucionando y refinando poco a poco.

Esta generación portó un motor V8 a 90º sobrealimentado de 5,4 litros con 558 CV y 678 Nm de par máximo, derivado de la unidad de potencia del Ford Mustang SVT Cobra R y el Ford Mustang Shelby GT500 de aquellos años.

Ford GT de tercera generación personalizado con pintura metalizada y llantas HRE.
Ford GT de tercera generación personalizado con pintura metalizada y llantas HRE.

Finalmente, la tercera versión del Ford GT sustituyó al bloque V8 por un motor V6 a 60º EcoBoost biturbo de 3,5 litros capaz de llegar a producir 656 CV y 746 Nm de par máximo. Se presentó, de nuevo, en el Detroit Motor Show de 2015. El objetivo era participar de nuevo en las 24 Horas de Le Mans en 2016, justo 50 años después de la primera victoria de Ford.

Se trata del coche más avanzado de la marca norteamericana: un superdeportivo muy ligero con un 0 a 100 km/h en 2,9 segundos y una velocidad máxima de 348 km/h. Chasis monocasco de fibra de carbono con jaula de seguridad integrada de aluminio, el primer Ford GT en incorporar una caja de cambios automática Poweshift de 7 velocidades y doble embrague...

Toda una joya con un diseño aún más radical e histórico, reservada a unos pocos afortunados elegidos por Ford tras un difícil proceso de selección. Un coche sensacional que, de nuevo, volvió a vencer en Le Mans en 2016 con el equipo Chip Ganassi Racing junto a los pilotos Sébastien Bourdais, Joey Hand y Dirk Müller. 

Desafortunadamente, el doblete no llegó en 2017, cuando Ford se tuvo que conformar con la segunda plaza por detrás del Aston Martin Racing Vantage GTE. ¡Aunque la historia ya está escrita!