Puedes comprarte un BMW M3 de segunda mano. O también puedes esperar al nuevo BMW M3 2020 para saber de lo que es capaz y entonces, y solo entonces, decidir si te tiras a la piscina con el de nueva generación o no. Porque parece ser que BMW ha hecho muy bien las cosas con el nuevo Serie 3, así que si hablamos de la versión deportiva lo único que podemos hacer es coger un babero y empezar a derramar saliva. Al fin y al cabo, son especialistas en fabricar berlinas deportivas. Pero claro, con el tiempo sus rivales también han mejorado, y mucho. ¿Esto quiere decir que son mejores? Pues... podría ser. Pero depende de lo que prefieras.

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BMW M3 2020: ¡llega para ser el rey!

Sin duda, el hecho de que vaya a existir un BMW M3 2020 con cambio manual es toda una declaración de intenciones. Ninguno de sus rivales más destacados, como son el Mercedes Clase C en su versión AMG C 63 S y el Audi A4 en su variante RS y familiar puede presumir de lo mismo. Minipunto (o puntazo, ¡qué demonios!) para el sedán de Múnich. Se trata de un elemento imprescindible para todos aquellos que quieran disfrutarlo a fondo en un circuito cerrado y que permitirá mucha más manga ancha a la hora de controlarlo.

Otro de los puntos fuertes del próximo BMW M3 será su comportamiento dinámico. Ya sabes que la marca bávara siempre ha sido una especialista en la puesta a punto de sus coches. Pueden tener unos ingredientes parecidos a los de otros modelos parecidos de otras marcas, pero su agilidad y su viveza de reacciones le ha caracterizado y marcado en todo momento. Para todos aquellos a los que les guste disfrutar más de la conducción, BMW ha solido estar en lo alto del podio.

Ahora bien, Mercedes ha hecho un trabajo excelente con el C 63 S. A todos nos enamora el sonido de un buen motor preparado por AMG, y la estética del modelo de la estrella es increíble. Muy bruta. Debajo del capó incorpora un propulsor sobrealimentado 4.0 V8 que entrega 510 CV. ¿Lo mejor? Todos esos potros van al eje trasero. Así que si querías una berlina potente y juguetona, la marca de Stuttgart también es capaz de dártela.

Por su parte, el Audi cuenta con una mecánica que entrega 450 CV. En comparación con el Mercedes podría parecer que se queda corto, pero te aseguro que este tipo de coches corren, y corren bien. Es más que complicado que te pongan en un aprieto, y a las velocidades a las que son capaces de moverse en el circuito bien podrían hacerlo. Además, en la última generación la firma de los cuatro aros ha mejorado el feeling que le da al piloto, lo que era una asignatura pendiente... Puestas todas las cartas sobre la mesa, ¿con cuál te quedas tú?