¿Conviene que retrasemos pasar la ITV en los días más calurosos?

Estas son las consecuencias de tener un accidente con un coche sin ITV

Gustavo López Sirvent

Elementos como los frenos, neumáticos, batería, aceite, motor, limpiaparabrisas o climatizador deben ser revisador convenientemente para evitar problemas tanto en tu día a día como a la hora de pasar la ITV

Si tienes que pasar la Inspección Técnica de Vehículos (ITV) en los próximos días y vives en zonas donde las chicharras son tu banda sonora diaria y tu termómetro no baja de 30 grados, piénsatelo dos veces porque igual tienes problemas en tu vehículo, ya que las altas temperaturas castigan a elementos clave del coche y pueden afectar al resultado de la inspección.

Si la fecha del reconocimiento la tienes próxima, sería conveniente no conducir en exceso durante los días de más calor y revisar bien las partes fundamentales de tu automóvil antes de pasar por el centro de revisión que tengas más cercano. Y si puedes porque la ficha técnica deja margen de maniobra para hacerlo, intenta posponer la cita.

Nos lo detalla claramente la asociación AECA-ITV, que menciona que un menor rendimiento “de los sistemas que sufren por el calor podrían incluso afectar el resultado de la inspección técnica”, refleja este colectivo que engloba a todos los centros de inspección. 

También nos recuerda esta agrupación las partes del vehículo que más cambios experimentan durante el verano:

  • Los frenos. Si el mercurio sobrepasa los 30 grados, los discos y las pastillas de freno pierden capacidad de refrigeración. Los discos pueden llegar incluso a sufrir deformaciones, reduciendo la eficacia de la frenada. Las altas temperaturas pueden afectar igualmente al líquido de frenos. 
  • Los neumáticos. Es muy factible que con el calor los neumáticos pierdan algo de aire. Por esta razón se recomienda vigilar la presión de las gomas más a menudo. Además, si te mueves por zonas donde suben mucho las temperaturas el desgaste en las ruedas también se incrementará (la ITV se fijará mucho en este punto) y se reducirá su vida útil hasta en un 15%.
  • La batería. La batería puede ver acelerador el proceso de envejecimiento debido a las altas temperaturas. Desde el colectivo de AECA comentan que, según algunos estudios, “una temperatura superior a 50 grados centígrados puede disminuir hasta en un 50% su vida útil”. Si tienes estacionado el coche bajo el sol, seguro que tendrás muy fácil llegar a esa temperatura. 
  • El motor. No solo los bajos niveles de aceite pueden perjudicar al rendimiento del motor durante el verano: también la disminución del oxígeno del aire, como consecuencia de las altas temperaturas, empeora la combustión en los cilindros. Revisar el nivel de refrigerante resulta clave para paliar los efectos del calor.
  • El aceite. Cuanto más alto esté el termómetro, mayor será la intensidad de evaporación de los líquidos del coche, y se corre el riesgo de alcanzar niveles bajos que afecten al funcionamiento del motor. En cualquier modelo de combustión –diésel, de gasolina o híbrido–, el lubricante es clave.
  • Los limpiaparabrisas. Tanto el calor como el frío deterioran las escobillas y empeoran su rendimiento. Otro de los aspectos que debes revisar es el nivel del líquido limpiaparabrisas, pues puede perderse mucha cantidad por evaporación.
  • La climatización. No tendrá que pasar ningún examen ni test en la ITV, pero si es recomendable que vigiles el aire acondicionado en verano y te asegures de que funciona bien antes de emprender un viaje largo.