Dodge escucha a sus fans y estudia darle al Charger un motor de gasolina

Dodge Charger.

Gustavo López Sirvent

Planea instalar el motor Hurricane V6

Mucho se habla de la electrificación de Dodge. Su último modelo presentado en agosto, el Charger Daytona SRT Concept,  es un coche eléctrico que contará con nueve niveles de potencia. Aun así, la firma estadounidense sigue pensando en sus fieles seguidores de los motores de combustión y está planificando mantener las mecánicas de gasolina en el futuro modelo de la citada gama.

La marca ha escuchado a sus fans, que reclamaban un propulsor de combustión interna, y ya planifica el nuevo motor de 6 cilindros en línea desarrollado por Stellantis, un bloque que sería el perfecto sustituto para los V8 de Dodge.

 Tim Kuniskis, CEO de la compañía americana, ya ha manifestado en el podcast Cars and Culture de Jason Stein, que la posibilidad de ver un motor gasolina en el próximo Charger es más que probable. Eso sí, habrá que esperar a 2024. 

Lo que ya se ha conocido desde el pasado mes de agosto es que los actuales Charger y Challenger desaparecerán del mapa en 2023 junto a sus plataformas y motores V8. Y la única novedad que los reemplazará es el citado SRT Concept.

Otra de las opciones que Kuniskis tiene sobre la mesa es que en el futuro pueda existir una versión gasolina auspiciada por el propulsor Hurricane, un motor 3.0 Turbo de 6 cilindros en línea y hasta 507 CV que ha visto la luz hace escasas fechas y lo hizo con marcas como Jeep o RAM. 

Esto sería posible dado que la plataforma empleada por el Charger Daytona será la nueva STLA Large, una arquitectura que en realidad es una evolución de la plataforma Giorgio de FCA y que por lo tanto es compatible con el uso de diferentes sistemas propulsión.

Dodge Charger eléctrico (2)

El motor Hurricane es menos pesado

El motor Hurricane mide aproximadamente la mitad del V8 HEMI, cuenta con un bloque de aluminio liviano, dos árboles de levas en cabeza y dos turbos. Si bien la potencia que reporta hasta ahora son 405 CV y 610 Nm de par como base y hasta 507 CV y 644 Nm de par, se dice que el rendimiento será muy similar al poderío que hoy en día encontramos en los Charger y Challenger.

La moldeabilidad del Charger provoca que sea más fácil poder realizar cambios a nivel mecánico, como demuestran las palabras de Kuniskis, por lo que habrá que esperar al anuncio oficial de que el motor de gasolina seguirá viviendo en el corazón de este muscle car tan aclamado y deseado.

Etiquetas: motores gasolina