Esas fotos extrañas: el Fiat Multipla y sus seis asientos

Fiat Multipla

Complicado de ver, pero con su puntito

El Fiat Multipla fue una revolución. Bueno, estaba destinado a serlo. Lanzado 1998, en plena fiebre de los monovolumen, juntó en su interior dos filas de tres asientos, como hizo años más tarde el Honda FR-V, en el tamaño de un Seat León. Ofrecía espacio infinito en un tamaño muy compacto.

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Pero Fiat se olvidó de una  cosa. La gente es vanidosa. Y las 'personas' son un factor muy importante para tener en cuenta cuando haces un monovolumen. 

Jugar con las proporciones típicas de un automóvil familiar llevó a una forma final cuando menos extraña. Una idea en la que los diseñadores se volcaron por completo: "Hagamos que esto parezca realmente peculiar". Desde luego, todo un experimento que no tenía por qué salir mal: después de todo la gente compra tabletas de chocolate con guindilla y cosas por el estilo.

Sin embargo, al público no le gustó laelMultipla. Porque aunque ofrecía de todo, le faltaba algo importante: belleza. 

Fiat Multipla I

Las ventas de Renault Scenic se dispararon; Opel lanzó el deliberadamente conservador Zafira (con siete plazas y el asesoramiento de Porsche en ingeniería) y, de repente, la rareza de Fiat era demasiado loca para tener una oportunidad.

Y en el fondo estaba genial

Aún así, no puedes culpar a Fiat por tratar de llamar nuestra atención hacia lo que hizo que el Multipla fuera lo suficientemente bueno como para ser coronado como Coche Top Gear del año cuando apareció, entre otros innumerables premios más serios. 

"La rareza de Fiat era demasiado loca para tener una oportunidad"

Mira la foto de prensa que encabeza este artículo, donde se ve su innovadora distribución de asientos completamente invadida por una familia de seis personas que aparece en lo que podría llamarse el Multipla más bonito de todos los tiempos: uno sin carrocería.

Y casi parece que están completamente felices, si no fuera por la mirada de acero del chaval que ocupa el asiento central. Sí, consiguió que sus padres le dejaran ir delante, pero en el fondo está pensando que ojalá hubieran comprado una berlina de cinco plazas normal y le hubieran dejado en casa jugando con su Dreamcast...