Lamborghini Jalpa: así era el último deportivo V8 de la firma italiana
Se cumplen 40 años de un coche muy especial
En este 2021 se han cumplido algunos aniversarios y uno de ellos tiene que ver con Lamborghini, ya que acaban de cumplirse 40 años del lanzamiento de su Jalpa, el último deportivo V8 que salió de la fábrica de la firma. Esta es su historia.
Se presentó en el Salón de Ginebra de 1981 como un prototipo. Estaba basado en el Silhouette y se dio a conocer con un color bronce metálico inconfundible. Sin duda, no pasó desapercibido y un año después se dio comienzo a su producción, la cual se mantuvo hasta 1987.
Como sucede con los modelos de la marca de Sant’Agata Bolognese, su nombre provenía de una raza de toros. Esto era así por la afición de Ferruccio Lamborghini por la tauromaquia y en este caso fueron los Jalpa Kandachia los que le pusieron el nombre a uno de los deportivos de la firma.
Pero, como es obvio, el coche tenía mucho más que un nombre curioso. Fue el desarrollo final del Urraco y el Silhouette, de manera que mantuvo su estructura, aunque contaba con un estilo propio. Y es que uno de sus elementos diferenciadores fue su carrocería Bertone diseñada por Frenchman Marc Deschamps y que incluía detalles como un techo Targa.
Al iniciar su producción, el Jalpa contaba con parachoques y entradas de aire en color negro, luces traseras rectangulares y las llantas de aluminio de 16” del prototipo Athon. Además, por dentro se intentó dar una apariencia de lo más lujosa, con una gran presencia de la piel en todo el habitáculo. Era aquí donde además podíamos guardar el techo abatible, en un compartimento tras los asientos.
Sin embargo, lo más llamativo de este deportivo era el aspecto mecánico. El motor del Lamborghini Jalpa fue un V8 de 3,5 litros colocado a 90º en posición central. Estaba hecho de aluminio y montaba cuatro árboles de levas controlados por cadenas.
Gracias a elementos como sus carburadores Weber 42 DCNF y a una mayor cilindrada, aunque el motor era el mismo que podíamos encontrar en el Urraco y el Silhouette, las prestaciones eran mayores. Ahora contaba con 258 CV a 7.000 rpm y 314 Nm de par máximo. Con este motor, el deportivo era capaz de alcanzar los 248 km/h de velocidad máxima.
En las primeras pruebas de conducción, esto se tradujo en unas grandes sensaciones al volante a nivel de manejo y entrega de potencia. No era un coche tan bestia como el Countach, ya que además contaba con un motor más pequeño, pero era capaz de transmitir unas buenas emociones al conducirlo.
Hasta 420 unidades fabricadas
Así, se mantuvo a la venta hasta 1988 y en 1984 fue actualizado con una segunda versión presentada en el Salón de Ginebra. El coche era similar, pero traía consigo cambios estéticos como los paragolpes y entradas de aire del color de la carrocería, unos nuevos pilotos traseros y un interior mejorado.
Durante sus años de producción Lamborghini fabricó solo 420 unidades de este modelo, y con él, se puso fin a los deportivos de la marca con un V8. Además, este fue el último de su clase en montar este tipo de bloque con esta configuración.
No cabe duda de que se trató de un coche muy especial, que de hecho no tuvo un sucesor conceptual hasta el año 2003, con el lanzamiento del Gallardo. Ahora ya han pasado cuatro décadas de su nacimiento, pero sigue y seguirá siendo un deportivo muy recordado.
