Hace unos días publicamos la noticia de que el primer Faraday Future FF 91 había salido de fábrica rumbo a sus pruebas de rendimiento, seguridad y demás aspectos necesarios para la homologación. De hecho, el FF91 de producción es muy parecido al mostrado hace años, así que todo parece ir por buen camino.

El coche de Faraday Future, que cuenta con una carrocería a caballo entre un monovolumen y un SUV, y con 1.065 CV de potencia, tendrá un interior a la altura de lo esperado. Si Tesla ya revolucionó el mercado con las grandes pantallas de sus coches eléctricos, ahora puede haber otro gran cambio de paradigma.

Muchas pantallas y, sobre todo, conectividad.

Uno de los puntos más destacable del nuevo Faraday Future FF 91 es sin duda su nivel de conectividad. Dependiendo de la versión, el coche podrá equipar hasta 11 pantallas, incluyendo un display de 27" específico para las plazas traseras, al que hay que sumar los monitores que sustituyen a los retrovisores, la enorme pantalla central y la del copiloto.

Sin embargo, el foco de la compañía estará puesto en la conectividad y el acceso a internet de estas pantallas a través de una serie de módulos 4G (que en un futuro, previsiblemente, se actualizarán al nuevo 5G).

¡Así subió el Faraday Future 91 a Pikes Peak!

Y como potencial coche de personas de negocios, los asientos traseros no podrían descuidarse, así que su nivel de conectividad para videollamadas, control de apps y mantenerse en contacto con otras personas será primordial. 

Tanto será así, que la IA (Inteligencia Artificial) desarrollada por Faraday Future se ha diseñado con el objetivo de aprender de los usuarios y hacer su experiencia digital más personalizada y rápida, capaz de reconocer incluso al conductor y adaptar a sus preferencias todo el coche.

Las pantallas son el presente: ¿El futuro es la conexión a internet?

La adaptación de las grandes pantallas a la industria del automóvil actual ha sido realmente rápida. En unos pocos años hemos conseguido grandes displays, incluso curvos en muchos casos, para controlar muchos aspectos de los coches y sus funciones multimedia.

Apple CarPlay y AndroidAuto son algunas de las elecciones de los usuarios para disfrutar de la experiencia multimedia, pero siempre enlazados a un smartphone. Entonces, ¿Cuál es el siguiente paso? Sin duda, la conexión a internet y el propio internet de las cosas.

Los smartphones son un complemento esencial actualmente en los automóviles, pero muy pronto no serán necesarios para ofrecer a los ocupantes de un vehículo una completa experiencia digital, ya que el propio coche constará con la posibilidad de tener conexión a internet y de aprender de sus ocupantes.

El Future Faraday FF91 ya lo plantea, como otras tantas marcas, con mucho hincapié en esta necesidad esencial de las personas y que facilitará en un futuro próximo el acceso a contenidos y multitud de controles.