Midnight Club: el legendario grupo de corredores japoneses disuelto
Un nombre que dio la vuelta al mundo, al igual que los motivos de la disolución del grupo.
La cultura JDM ha dado para muchísimas historias y leyendas a lo largo de los años. Desde las hazañas de Smokey Nagata o las modificaciones de Akira Nakai hasta los grupos de corredores callejeros como el Kanjozoku o, en este caso, del Midnight Club.
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El Midnight Club fue una organización de pilotos que condujeron no solo coches japoneses, sino también europeos. Comenzó sus andadas allá por los años 70' y que se disolvió en 1999, como una premonición del ocaso de la cultura automovilística que se avecinaba.
Corredores callejeros con máquinas increíbles
Los datos son escasos, y la historia da para un documental que debería ser grabado en las mismísimas tierras de Tokio y sus alrededores. Los miembros de la Midnight se dejaron ver durante años en las noches que inundaron la Wangan, conocidad oficialmente como la autopista de Shuto, que conectaba la capital japonesa con Yokohama.
Se trató de la banda de corredores callejeros más respetada de la época, lo que llevó a sus miembros a la fama gracias a multitud de artículos de la prensa de la época sobre sus coches y modificaciones. Como fecha oficial, se toma el año 1985 para reconocer su fundación bajo un estricto código ético.
El requisito imprescindible para el ingreso en el club era el de poseer un vehículo capaz de sobrepasar los 250 km/h, y esto no aseguraba la membresía final, que debía ser evaluada tras un año como rookies.
Anonimato como base del grupo
La base del Midnight Club fue el anonimato de sus miembros, que se dice nunca conocieron sus verdaderos nombres y se movían en la escena urbana bajo pseudónimos, con el objetivo de mantener la seguridad y reputación en sus vidas diurnas. Algo muy parecido a la costumbre de los Kanjozoku de portar máscaras o pasamontañas en mitad de sus eventos.
La forma de identificar a aquellos coches fue mediante los vinilos instalados en el parabrisas y en algunas zonas de la carrocería. Estos vinilos eran exclusivos de los miembros del grupo, y si alguien externo los portaba, se tomaban serias represalias contra su vehículo.
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También es conocido que las reuniones de miembros se efectuaban mediante anuncios secretos en los periódicos locales, como los que rezaban ventas de objetos en lugares cercanos a la Wangan (como el aparcamiento de Daikoku Futo) a cierto día y a una hora específica.
Coches modificados que nunca fueron atrapados por la policía
Nunca en sus casi dos décadas de historia, un miembro del Midnight Club fue detenido por las autoridades. Los coches deportivos que conducían estaban completamente fuera de alcance de la policía, y el conocimiento de las rutas y carreteras de la Wangan por parte de los corredores era extremo.
Entre sus decenas de miembros al final de la vida del club, destacaron coches como el Nissan 300 ZX Z32, los Nissan Skyline GT-R, Mazda RX-7, Toyota Supra o automóviles europeos como los Porsche 911 o un Ferrari Testarossa.
Ante el desafío de otros clubes de la zona, se escogía a un piloto de entre todos los miembros para correr en nombre del grupo a lo largo de Shuto. Es conocido que el Midnight solo conoció la derrota una vez, contra un Nissan Fairlady Z de primera generación modificado.
Su coche más emblemático: el Porsche Yoshida Special 930 Turbo
Yoshida san fue el presidente del Midnight Club durante gran parte de la existencia del grupo. Su coche fue un Porsche 911 930 Turbo modificado de color vino, con nuevas versiones de partes de la carrocería y llantas antipinchazos Porsche de competición, una jaula antivuelco de arco completo con asientos baquet, arneses...
En total, el bólido superó los 600 CV de potencia allá por los años 80' gracias a muchos preparadores japoneses y a la intervención directa del departamento de carreras de Porsche en Stuttgart, con una velocidad máxima de más de 320 km/h.
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Se rumorea que este Porsche 911 llegó a montar componentes del Porsche 962C, un bólido del Grupo C que venció durante varios años consecutivos en las 24 Horas de Le Mans. También hay rumores que afirman que Yoshida se hizo con uno de los turbos del motor Honda del McLaren MP4/4 de Fórmula 1 que pilotó el mismísimo Ayrton Senna. Todo ello a golpe de cuenta bancaria.
Muchas historias y leyendas difíciles de confirmar, pero que se han repetido sin cesar durante los últimos 30 años. Cuando el río suena, agua lleva...
La reputación de este Porsche Yoshida Special 930 Turbo es desde entonces legendaria, y se encuentra guardado en la colección privada del concesionario de Tokio Premier Cars de Odaiba. Un lugar reservado a deportivos sencillamente icónicos y verdaderos unicornios.
La disolución debido a un choque de bandas
La historia del Midnight Club se terminó en 1999. La fama del grupo comenzó a ser enorme gracias a lo que se hablaba en las calles y los artículos de prensa, y una noche de aquel año, un grupo de Bosozoku (motoristas callejeros) retaron al club a una carrera.
Desafortunadamente, uno de los Bosozoku chocó muriendo en el acto y provocando un gravísimo accidente que se llevaría consigo a uno de los bólidos del Midnight Club y a varias motos que venían detrás. El altercado fue enorme, y el código ético del equipo hizo acto de presencia.
Una de las normas clave para el Midnight Club era que, en caso de algún accidente que acarrease la muerte de participantes, conductores ajenos o público, el grupo debería disolverse inmediatamente. Y así fue como, de la noche a la mañana, el Midnight Club desapareció de Japón y nunca se volvió a saber de él y de la mayoría de sus miembros.