Por qué el GP de Las Vegas es fundamental para la Fórmula 1

Evento promocional de Red Bull en uno de los casinos de Las Vegas. (No, no es parte del circuito)

Hay mucho en juego en esta carrera, porque lo que sucede en Las Vegas... no se quedará en Las Vegas.

La llegada de la Fórmula 1 a Las Vegas puede suponer el apocalipsis para los puristas del automovilismo, aunque también el nuevo punto culminante de un calendario que consolida el deseo de Liberty Media de ofrecer el equivalente a una Superbowl en cada carrera. 

Hasta el momento, todo lo que la ha rodeado ha sido más emocionante que lo que aparentemente nos espera (sin menospreciar el extraordinario dominio de Max Verstappen y Red Bull). 

Los 9 coches de carreras que dominaron todo: desde Le Mans hasta la F1

El GP de Las Vegas es una cita de alto riesgo, la culminación del brutal espectáculo que es la F1. Dado el lugar en el que se disputa, quizá la carrera en sí sea secundaria y el contexto sea más importante que lo que ocurre en él. 

Los pilotos han reflexionado sobre ello, con conclusiones opuestas: "Va a ser muy fructífero para el negocio", asegura Lewis Hamilton. 

Y desarrolla su idea así: "Tener más carreras en Estados Unidos siempre fue positivo porque es un mercado enorme. Hay una gran afición a los deportes y para abrirse camino hace falta más de una carrera ahí. Y Las Vegas es un lugar emblemático". 

"El sueño de conducir por [el Strip] con todas esas luces de los casinos... Me hace mucha ilusión poder vivirlo. No sé si será un gran circuito, pero siempre estoy dispuesto a disputar grandes carreras en grandes lugares".

Verstappen es más cauto: "En primer lugar, creo que estamos allí más por el espectáculo que por la competición en sí, si nos fijamos en el trazado de la pista", señaló durante el fin de semana del GP de Brasil (escenario de su 17ª victoria de la temporada). 

"Pero ya sabes, en realidad no estoy tan metido en eso. Soy más de ir allí, hacer lo mío y volver a irme. Todavía tengo que ir al simulador. Aún no conozco la pista, para ser honesto".

No esperes que ninguno de los pilotos arruine su imagen tirando los dados en la ruleta, pero el próximo fin de semana trabajarán muy duro por su dinero en nombre de los patrocinadores de sus equipos. Esperemos que no tengan que llevar monos de Elvis...

Un nuevo punto de vista en el coste de la carrera

Por su parte, el principal accionista de la Fórmula 1, Liberty Media, trabaja más duro que nadie. Esta carrera puede cambiar las reglas del juego porque, en lugar de llegar a un acuerdo con un promotor individual como hace con otras sedes, la F1 se promociona a sí misma en Las Vegas (junto con la Autoridad de Convenciones y Visitantes de Las Vegas). 

En otras palabras, asume el coste de la infraestructura, fijado en 316 millones de dólares, pero que según algunas fuentes se acerca a los 500, y dirige todo el espectáculo. 

La F1 afirma que tendrá un "impacto económico total" de 1.280 millones de dólares. Y lo que es más importante, si funciona, validará un nuevo modelo de negocio y un nuevo enfoque. Puede que así, incluso los cacareados GP de Madrid o Londres, de los que tanto se ha hablado, sean una realidad.

No cabe duda de que es una importante fuente de ingresos. Una entrada de tribuna para tres días cuesta hasta 2.500 dólares (aunque los precios están bajando después de los valores disparatados de hace un año), y las entradas generales ya están agotadas. 

Si a alguien le parece un poco caro, hay ofertas tentadoras. Piense en el paquete Nobu Sky Villa Emperor que ofrece Caesars Entertainment. 

Por unos 5 millones de euros, incluye cinco noches en un espacio de 950 metros cuadrados con tres habitaciones y una enorme terraza con vistas al Strip, cena para 12 personas especialmente preparada por el chef Nobu Matsuhisa y acceso para el mismo número de personas al Paddock Club de la F1. 

Dicho esto, algunos de los hoteles de categoría media de Las Vegas han reducido sus tarifas (lo he comprobado), y se dice que los equipos no han cambiado todos sus costosos paquetes del Paddock Club. 

Puede que esta vez la F1 se haya pasado de la raya. La amenaza de huelga del sindicato Culinary Workers Union, cuyos miembros son los trabajadores de la hostelería que mantienen la ciudad en funcionamiento 24 horas al día, 7 días a la semana, ha parado, pero no deja de ser un serio golpe de dura realidad frente a las luces y el espectáculo.

Pero al final esto tiene que ser divertido y la F1 en Las Vegas es una distracción más escapista que nunca y además se verá espectacular en la televisión. 

Recordemos también que el antiguo maestro de ceremonias de la F1, Bernie Ecclestone, estaba obsesionado con el éxito en EEUU, así que esto no es nada nuevo. 

Puede que Verstappen no se comprometa, pero el circuito diseñado por Carsten Tilke (5,8 km, 17 curvas y una pasada a 341 km/h por el Strip) es puro show.

Además, se trata de una carrera nocturna, que empezará el domingo a las 07.00 para aprovechar al máximo el poder de las luces de neón de la ciudad. También significa que las bajas temperaturas del desierto añadirán otro elemento de peligro. Las cosas podrían complicarse mucho... pero eso es otra historia.

Etiquetas: Fórmula 1