Este es el Lamborghini Huracán Sterrato. Míralo varias veces en las fotos, porque incluso así te costará asimilar lo que tus ojos están viendo. Efectivamente, Lamborghini ha hecho una versión offroad del Huracán. Pero seguro que no va a formar parte de los todoterrenos baratos del mercado. ¿Y realmente tiene sentido hacer una variante de este tipo? Pues mire usted, en el juicio de cada uno está valorar si este Lamborghini Huracán todo terreno es una genialidad o una aberración.

Lamborghini Huracán Sterrato: ¿sinsentido o genialidad?

No hace falta un máster de Harvard para darte cuenta que no es un Lamborghini Huracán muy normal. Veamos: suspensión elevada con respecto al modelo de serie, neumáticos offroad, protecciones plásticas y metálicas en todos los bajos de su carrocería... Efectivamente, parece dispuesto a devorar cualquier etapa de rally que se le ponga por delante.

Según la marca, el Lamborghini Huracán Sterrato está destinado a unir el mundo de los coches deportivos con los entornos más desafiantes. Con la primera premisa cumple, ya que debajo del capó se encuentra el mismo propulsor que el del Huracán Evo. Un bloque atmosférico de gasolina V10 de 5.2 litros que entrega 640 CV de potencia y 600 Nm de par motor máximo.

Y para ser fiel al segundo punto, los ingenieros de la marca han retocado algunos aspectos para que se pueda adaptar a las superficies menos adecuadas para un coche como el Huracán. Por ejemplo, el sistema LDVI (Lamborghini Dinamica Veicolo Integrata) se encarga de que la trasera se comporte mejor y garantice la tracción. Además, aporta un punto extra de estabilización en los momentos de sobregirare. ¿Traducción? Pisa el acelerador a fondo y encárgate del volante.

En comparación con un Huracán Evo estándar, el Sterrato tiene una carrocería elevada en 47 mm más, mientras que el ensanche de las vías alcanza los 30 mm. También incluye un difusor específico, nuevas entradas de aire y protección para que ninguna pedrada se atreva a dañar el motor. El interior todavía no ha sido desvelado, pero en él hay unos asientos deportivos de carbono con arneses de cuatro puntos y un suelo de aluminio.

Más allá de todo lo anterior, nos sorprende (y nos encanta) la barra de luces LED en el techo y las adicionales en el morro. ¿Inesperado? Pues sí, para qué nos vamos a engañar. ¿Tendría sentido para todos los baches que nos encontramos en la carretera? Pues también, oye. Aun así, yo todavía me voy a quedar mirándolo durante "Sterrato" para digerirlo...