Opinión: ¿Adiós al cambio manual en autoescuelas? Sinsentidos del futuro

Palanca de cambios manual del Hyundai i20N.

¿Sería un paso lógico abandonar próximamente el cambio manual en los coches de autoescuela?

La palabra 'futuro' es uno de esos vocablos que sirve para designar algo bueno que está por venir o para justificar verdaderos sinsentidos y, desde luego, la idiotización de la sociedad en muchos ámbitos. Llega el coche eléctrico, poco a poco el cambio manual desaparece... ¿Es momento de usar coches automáticos en las autoescuelas?

Puede ser. El razonamiento podría simplificarse a 'es lo que está por venir'. Y también podríamos dejar de enseñar en las escuelas a sumar, restar y multiplicar a mano, porque todos tenemos ya una calculadora y un móvil. Y no es momento de presumir, porque no sé vosotros, pero a mí me cuesta ya dividir a la vieja usanza y soy bastante joven. Cosas que pasan.

Volviendo al tema, hacer cuentas es algo simple y sencillo. Aprendes y evolucionas, pero desde luego no te juegas la vida con ello. Conduciendo sí. Voy a dejar de lado brevemente la concepción de conducir como un arte que muta en pilotar

Eso son romanticismos para gente como tú, que estás leyendo esto y tienes un poster o una maqueta de Ferrari en tu casa, y como yo, que crecí viendo a Michael Schumacher y Fernando Alonso en Fórmula 1.

Me atrevo a decir que las autoescuelas son muy, muy deficientes. Ninguna novedad. Entras pensando que vas a aprender a conducir y te tiras toda una vida aprendiendo. Encada curva, en cada peralte, en cada situación meteorológica. Hago fácilmente 70.000 kilómetros al año, y cada día aprendo más.

Hace poco, escuché a dos pilotos de drift (Rebeca Aramburu y Yanibel Díaz) hablar muy enserio acerca de que, si nos dejásemos de tonterías y enseñásemos conducción deportiva a los chavales y chavalas de hoy en día, se salvarían muchas vidas. Esos muchachos, el día de mañana en una curva con lluvia, se van de morro contra el quitamiedos y el máximo reflejo que tendrán será el de frenar. 

En las autoescuelas te enseñan a circular bajo el límite de velocidad, a respetar las señales y a mantener ciertos parámetros de decoro que a la hora de la verdad, luego pocos cumplen. Con que pongan el intermitente en las rotondas, nos conformo.

Si a la escasa enseñanza le quitamos el cambio manual, apaga y vámonos. No es el momento ni si quiera de plantearlo. Menos si cabe en España, con la situación económica que vivimos año tras año. Son muy pocos los afortunados que pueden comprarse un coche nuevo hoy en día. No digamos ya un automático o un eléctrico.

A montar en bici se aprende primero con ruedines, luego raspándote los nudillos y con caídas colina abajo. Y luego, si quieres, te compras la bicicleta eléctrica con ABS y control de tracción (¿Eso existe? A saber, no me extrañaría).

Lo primordial al conducir es saber como funciona la mecánica del cambio de marchas. Eso explica otras muchas cosas. La entrega de potencia, freno motor, bloqueos, pérdidas y recuperación de tracción... Es lo básico, y a España (y el mundo) aún le quedan muchos años de 'palanquita'.

¿Y si en 2035 solo se venden eléctricos? Pues plantearemos el tema en 2035. Y los románticos que tengan un coche clásico manual en el garaje, que aprendan como lo hemos hecho muchos. En un descampado y en carreteras de montaña, poco a poco.

El afán por avanzar el futuro es inútil. Mucho, teniendo en cuenta los problemas presentes en tantos ámbitos, incluso dentro del mundo de la automoción. Lo suyo sería seguir aprendiendo a sumar a mano y a cambiar de marchas con la palanca. Y si quieres algo de estilo y vas a por nota, quizá frenando y con un tutorial de YouTube te animes al punta tacón.

Ya habrá tiempo de echar de menos la felicidad en las pequeñas cosas. Dejemos esto tal y como está.