Toyota amplía su museo...¡Con un Honda NSX!

Honda NSX de 1991 en el Museo Toyota

¿A que no os lo esperabais? 

Sí, lo habéis leído bien. El Museo Toyota tiene un nuevo coche en sus instalaciones y no se trata de un modelo de la marca, sino de uno de la competencia. La marca nipona ha añadido nada más y nada menos que un Honda NSX de 1991 a su muestra permanente. 

Probablemente os estaréis preguntando por qué han decidido incluir este modelo en sus instalaciones, y la razón no es otra que valorar su importancia en el automovilismo. Al fin y al cabo, se trata del primer coche de producción en serie en incorporar una carrocería monocasco de aluminio, algo que Toyota ha querido poner en valor.

Es esta razón y otras de sus cualidades, que le convirtieron en un coche realmente revolucionario a principios de la década de 1990, las que han hecho que ahora una unidad se haya expuesto en este museo. Por ello, ahora un impoluto ejemplar en color rojo puede ser admirado por todos los que visiten esta muestra.

Y es que el Honda NSX original sorprendió mucho por sus grandes prestaciones -gracias a su V6 de 3 litros con 274 CV- y su comodidad, pese a ser un deportivo con todas las de la ley. Esto, sin tener en cuenta que el mismísimo Ayrton Senna colaboró en su desarrollo, de manera que el resultado fue el de uno de los mejores coches creados por la firma asiática.

Así, este modelo entra en el Museo Toyota para reunirse con otros Honda ya expuestos allí, como el N360 o un CIvic de primera generación. Eso sí, no es la única marca ‘intrusa’ que podemos encontrar en este edificio, tal y como podemos ver en las fotos del post de Facebook publicado por la institución.

Allí podemos ver otros coches como un Mercedes 190E, un Nissan Skyline GT-R (R32) y un Mazda MX-5 (NA). En todos los casos, grandes coches que destacaron en su momento por sus prestaciones, su fiabilidad o su innovación.