El Mercedes Clase A ha tenido una vida larga y provechosa. Empezó en 1997 como un controvertido monovolumen pequeño que, para colmo, "bajaba al barro" a una marca históricamente premium.

A los fallos de fiabilidad que sufrían, especialmente los A170 CDI, se le unió el fallo en el test del alce que dio la vuelta al mundo: si aún no habías nacido, te lo resumo: el Clase A volcó en una prueba de esquiva hecha en Suecia.

La crisis empezó a salpicar a la marca durante la presentación del primer Maybach de la era moderna y la solución fue radical: se llamó a revisión a los 17.000 Clase A que ya se habían vendido para añadirles el ESP, y desde ese momento todos los coches salieron de la fábrica con el sistema de seguridad.

Tras una segunda generación depurada, pero aún monovolumen, en el año 2012 dio el primer golpe de timón de la marca con la tercera generación. El modelo creció, dejó su silueta monovolumen y se convirtió en un compacto que despegó en ventas casi de inmediato... y que ha terminado convirtiéndose en un modelo emblemático que no para de darle alegrías a los de Stuttgart.

Sin embargo, con los tiempos turbulentos que corremos y la llegada de la electrificación, ya no está nada claro. Y un ejemplo es el Clase A, que podría despedirse de su andadura tan pronto como en 2025 al ser sustituido por el modelo de producción que saldrá del concept CLA Class.

Bueno, más o menos, porque una 'A' sí que seguirá existiendo. En El Salón de Múnich de 2023, Ola Källenius, Presidente del Consejo de Administración de Mercedes-Benz Group dijo lo siguiente:

“El Concept CLA Class es el precursor de un segmento totalmente eléctrico completamente nuevo de vehículos de acceso en Mercedes-Benz. La gama comprenderá un total de cuatro nuevos modelos: un coupé de cuatro puertas, un shooting brake y dos impresionantes SUV”

Es decir: a juzgar por esta afirmación y por la imagen que distribuyó Mercedes (una especie de CLA eléctrico), nos podemos olvidar de un hatchback de cinco puertas como el que conocemos hasta ahora.

Según el diario Handesblatt, en Mercedes van a dejar de lado la cantidad para centrarse en la calidad. Bueno, mejor dicho: el volumen por la rentabilidad. 

Y esta suele estar en coches más caros y complejos, por lo que también estamos ante una más que probable subida de precio en el escalón de acceso a la marca.

A cambio, en Mercedes prometen un eléctrico sobre la plataforma MMA (Mercedes Modular Architecture) con la que podrían llegar a alcanzar cifras entre recargas de más de 750 km y consumos de 12 kWh/100 km.

Por ahora, el modelo actual tiene asegurada su existencia hasta 2025, momento en el que llegará al fin de su andadura comercial: la llegada del eléctrico le dirá adiós al Clase A y hola al Clase CLA...