Este Aston Martin DB5 Shooting Brake es lo más molón que verás hoy
Los mejores shooting brake son coches, por norma general, queridos y cotizados. Es una carrocería poco vista: dos puertas, estilo coupé pero con una zaga terminada en forma de coche familiar. No es una cuestión de practicidad, es una cuestión de estilo. El Aston Martin DB5 Shooting Brake representa a la perfección ese estilo y el ejemplar que voy a mostrarte a continuación es uno de los mejores que puedes comprar.
Te interesa: ya puedes comprar el Aston Martin DB5 de James Bond
Muchos no lo saben, pero 12 Aston Martin DB5 Shooting Brake salieron de la fábrica, solo cuatro de ellos con el volante en el sitio correcto. La historia de su creación es apasionante. David Brown era un gran aficionado a los coches deportivos, pero también a la caza. Su perro siempre ensuciaba la preciosa tapicería de su DB5, por lo que un día Brown decidió actuar.
Dice la leyenda que David Brown entró en la sala de reuniones con los ingenieros y propuso una solución al problema con su perro. El resultado fue un Aston Martin DB5 Shooting Brake, diseñado, desarrollado y creado por la propia Aston Martin. Sin embargo, la capacidad de producción de su fábrica estaba a tope, por lo que Brown acudió a su amigo, el carrocero Harold Redford, para ver si él se podía encargar de la fabricación.
Dicho y hecho: Redford fabricó 12 ejemplares del Aston Martin DB5 Shooting Brake, para David Brown y para otros clientes interesados en esta carrocería: ocho con el volante a la derecha y cuatro con el volante a la izquierda. El ejemplar que tenemos hoy aquí es uno de los únicos cuatro ejemplares con el volante en su sitio y representa a la perfección lo que debe ser un Shooting Brake, un modelo en el que seguro que se ha inspirado Andrea Zagato a la hora de diseñar el espectacular Aston Martin Vanquish Zagato Shooting Brake.
El ejemplar de hoy es el chasis 2273 y se pondrá a subasta en el Concurso de Elegancia de Pebble Beach 2019, en el marco de la Monterey Car Week, probablemente el evento más importante del año en términos de coches de lujo. David Brown consiguió su objetivo: con los asientos traseros abatidos, este DB5 Shooting Brake superaba los 1.000 litros de capacidad de carga, ya no solo podía llevar a su perro, también todo el material de caza y las presas.
Tal como se puede ver en la documentación que puedes ver en la galería de fotos sobre estas líneas, el precio de la conversión era de 1.200 libras esterlinas, un precio que en 1965 era una auténtica fortuna. Tanto es así, que podía suponer un sobreprecio de un 35% respecto a un modelo normal. Por eso tan pocos fueron fabricados, supongo que los que querían un coche familiar se compraban también un Rolls-Royce.
El coche fue entregado nuevo a Rainer Heumann, un suizo fan de la marca. Durante 30 años, el señor Heumann utilizó su DB5 Shooting Brake como coche de diario (no se puede sentir más envidia y admiración). En 1996, el coche necesitaba una restauración completa y cinco años después, el coche fue vendido. El siguiente propietario, también suizo, lo volvió a restaurar, incluyendo una mejora del motor y una nueva caja de cambios ZF de cinco velocidades.
El tercer y último propietario recuperó elementos del modelo original como los carburadores SU HD8, mientras que mejoró la suspensión, incluyendo amortiguadores R.S. Williams y fue equipado con las llantas originales de 15 pulgadas. También se pintó en su color original, en un color plata llamado Silver Birch. Sin duda, el Aston Martin DB5 Shooting Brake que puedes comprar es un pedazo de la historia de la marca.
Y por eso su precio está acorde, convirtiéndose sin duda en uno de los Aston Martin más caros sobre la faz de la tierra. Pese al uso que se le ha dado, el coche está como nuevo, completamente restaurado y solo hace falta mirar las fotos para darse cuenta. ¿Su precio? Se estima que ronde entre un millón y 1,4 millones de euros, un precio que en subasta podría variar sustancialmente. Veremos cuánto terminan pagando por esta joya sobre ruedas.
