El burnout más caro de la historia…¡y doloroso! ¡Y caro!

Bugatti Veyron quemando rueda
Pocas veces has visto 40.000 dólares volar tan rápido.

Ver a un Bugatti Veyron haciendo un burnout no es habitual: son varios los motivos por los que un Bugatti Veyron quemando rueda es una rareza. El primero es su tracción integral: hacer donuts con un coche con la tracción en las cuatro ruedas no es tan sencillo ni suele ser tan efectivo a la vista. Normalmente, el fracaso está prácticamente asegurado, pero cuando tienes 1.200 CV bajo el pedal derecho, no hay tracción integral que se resista: quemarán las cuatro ruedas a lo loco.

El segundo motivo (y probablemente el principal) es el coste de quemar rueda con un Bugatti Veyron: cada set de neumáticos cuesta la friolera de 40.000 euros. Sí, el Bugatti Veyron, al igual que su sucesor, el Bugatti Chiron, monta unos neumáticos especiales y únicos para él, desarrollados y fabricados por Michelin con un precio de 10.000 euros cada uno y con una descomunal medida trasera de 365 mm. Son una maravilla de la técnica y permiten a este pesado vehículo volar a más de 400 km/h con total seguridad.

Ahora bien, Bugatti recomienda que cada tres juegos de neumáticos se sustituyan también las llantas, unas llantas que en el caso de este Bugatti Veyron preparado por Mansory son especiales y cuestan unos 150.000 dólares. En el vídeo afirman que este burnout cuesta la friolera de 200.000 dólares, aunque la verdad es que viendo las imágenes, no sé si lo que más miedo me da son las ruedas o todo lo demás.

Y es que al fin y al cabo, cualquiera de estos coches son tremendamente delicados y poner al límite sus 16 cilindros y cuatro turbos de esa manera hace que me ponga a temblar: duele, es inevitable que duela. El susto todavía es mayor cuando a mitad de los donuts el coche se para y sufre un problema de motor. El resultado es espectacular cuando vuelven al taller y comprueban los resultados de hacer donuts con un Bugatti Veyron.

Los neumáticos han sido destrozados en un abrir y cerrar de ojos, al menos 40.000 euros mandados directamente al carajo en apenas segundos. Pero hay más: el motor se paró debido a que el humo generado por las ruedas entró en el motor e hizo que entrase en modo de seguridad, al no contar con el suficiente aire limpio para producir correctamente la combustión. ¿Pudo provocar más daños esta jugada? Pues en el vídeo no lo aseguran, pero la verdad es que no me extrañaría nada. Y una avería en un Bugatti significa euros, muchos euros.

¿Qué haces cuando tienes tanto dinero que no sabes en qué gastarlo? Pues lo tiras, aunque hay que reconocer que esta forma de tirarlo es atractiva y espectacular. Un Bugatti Veyron quemando rueda es una de las cosas más locas que hemos visto últimamente y demuestra que siempre hay gente dispuesta a hacer lo que otros no se atreven, o no pueden. Al fin y al cabo, destrozar los neumáticos de un Bugatti Veyron en segundos es algo que pocos, muy pocos pueden hacer.