El Ferrari 400i: Un cavallino con complejo de Mazda RX-7
Has leído bien: un Ferrari con complejo de Mazda RX-7, y no es broma. Aunque por fortuna (o desgracia), no llevó motor Wankel.
Esta historia es de esas poco conocidas y muy curiosas. Y viene de antes del Ferrari 400i, porque todo comenzó con el Ferrari 365 GT4 , que tuvo un diseño prácticamente idéntico a su sucesor. Y al del Mazda RX-7 de primera generación.
Corrían los últimos años de la década de los 70' y principios de los 80'. Años en los que nació el RX-7 de primera generación, que abarcó desde 1979 hasta 1985 en su versión SA22C o FB. Un coche con un largo capó y faros retráctiles junto a una amplia luna trasera que prescindía de anchos pilares en la curvatura sobre las aletas.
No, no fue una copia. La tendencia de aquellos años marcó el diseño de muchos deportivos
Sin embargo, hay que dar el voto de confianza a Ferrari, porque el 365 GT4 2+2 data de 1972, y fue sustituido en 1976 por el citado Ferrari 400. En esencia, el mismo coche con la carrocería diseñada por Pininfarina sobre el mismo chasis y el mismo motor, aunque con la peculiaridad de tener una caja de cambios automática.
El motor estaba basado en el V12 del Daytona, ahora aumentado hasta los 4,8 litros y con una potencia máxima de 335 CV. Aquel motor usaba carburadores, como muchos de los Ferrari de la época, y desde 1979 hasta 1985 se sustituyeron por un sistema de inyección Bosch K-Jetronic en las versiones Ferrari 400i y Ferrari 400i GT.
Esta modificación supuso un peor rendimiento, con la disminución de potencia hasta los 310 CV pero con una notable mejora de emisiones. Para 1985, las formas de la carrocería se alejaron de esas semejanzas con Mazda en los modelos Ferrari 412 y 412 GT.
Además, se aumentó la capacidad de sus motores hasta los 5,0 litros y 335 CV, y se convirtieron en los primeros Ferrari en ofrecer un sistema ABS de frenos antibloqueo, con transmisión manual y opción automática.
Su precio actual depende de las versiones, pero en el portal RM Sotheby's se han llegado a subastar unidades en una media de 100.000 euros. Toda una rareza, ¡sobre todo en las versiones manuales!
