5 bicharracos que marcaron tu niñez… sin ser coches

No son coches, vale, pero también nos habría gustado conducirlos…

Los coches de Harrison Ford: ¡feliz cumpleaños! 

Hay dos verdades universales: una, todos hemos tenido infancia. Dos, en esta vida, aunque nos cueste reconocerlo, hay más medios de transporte molones además de los coches. Pensando en la combinación de estos dos axiomas, en la redacción nos hemos puesto a pensar en esos vehículos que queríamos conducir cuando éramos pequeños… y a los que tampoco diríamos que no de mayores, seamos serios. Porque ahora tenemos conocimiento de causa y sabemos que la oportunidad de llevar el Halcón Callejero o el Trueno Azul puede ser (casi) tan satisfactoria como dar un paseo salvaje en el Aston Martin Vulcan.