Los SUV híbridos están de moda y el cuerpo lo sabe. Si a día de hoy te apetece tener un coche que contamine poco, que gaste menos aún, y con el que puedas transportar a la familia sin problemas ya sea por autopista o por una ciudad con restricciones por contaminación... amigo, se me ocurren pocas opciones mejores. Una marca especialista en este tipo de coches es Lexus, cuya última novedad es el Lexus NX 300 Black Line. Una edición especial del NX 300h que llega en una tirada muy reducida. Pero tampoco te hagas muchas ilusiones: está pensado tan solo para el mercado de Estados Unidos.

Lexus NX 300 Black Line: 2.000 unidades para Estados Unidos

Así es. De momento la marca japonés ha decidido no comercializar este SUV en Europa, aunque ya se sabe que nunca se puede decir "de este agua no beberé". Pero no está previsto. Sea como fuere, el Lexus NX 300 Black Line es un todoterreno cuyo exterior me recuerda personalmente al del Cupra Ateca. No por diseño, obviamente, sino por su combinación de colores. A pesar de su nombre, se puede elegir con una carrocería en blanco, gris o rojo. Pero el de la foto de portada, gris y con llantas que tienen detalles en color cobre... no me negarás que se da cierto aire al SUV deportivo español.

Su nombre procede del tono de los detalles, como las llantas, la parrilla frontal, los espejos retrovisores laterales o las partes bajas de los paragolpes y las protecciones plásticas. En el interior incluye una pantalla multimedia de 10,3 pulgadas que incorpora Android y que instala el nuevo sistema de infoentretenimiento del fabricante nipón. De todas formas, a pesar de que esta edición especial se comercializará solo en EEUU, se espera que su éxito sea mundial, expectativas que también se tienen con el Toyota Corolla que probamos hace unas semanas.

Como supongo que ya te imaginarás dada la singularidad del Lexus NX 300 Black Line, los detalles son numerosos. Así, el habitáculo está construido con materiales de mucha calidad entre los que destacan la piel negra del interior y los añadidos en bronce a modo de contraste. Además, el equipamiento de serie incluye, entre otros, unos asientos ventilados, un volante calefactable con memoria de posición y diversas ayudas a la conducción, como el asistente de aparcamiento.

En lo relativo al motor, no cambia nada. Sigue con el mismo sistema de propulsión híbrido que entrega 197 CV de potencia, suficiente para mover bien a este japonés. El precio parte de algo más de 40.000 euros al cambio, pero ya sabes, por el momento está vetada su comercialización en el viejo continente...