Seat Toledo Podium: el coche de los ganadores de Barcelona '92

Seat Toledo Podium

Una rareza de la que quedan dos unidades

En esta semana se están celebrando los 30 años de los Juegos Olímpicos de Barcelona. En aquella edición, como en cualquiera, lo importante era ganar medallas. Sin embargo, ese no era el único premio que se podía conseguir, ya que también se entregó un coche: el Seat Toledo Podium.

Con motivo de la celebración de este evento en España, Seat tuvo algunas ideas, como la creación de ediciones especiales de modelos como el Ibiza. Sin embargo, esa no fue la más llamativa, ya que también se pensó en configurar un coche que sería entregado solo a los medallistas españoles.

Seat Toledo Podium

Así, en la marca española decidieron tomar como base al Toledo GT 2.0 8V, al cual dotaron de todo tipo de novedades con la idea de lograr un acabado más lujoso. Cada unidad debía diferenciarse claramente de cualquiera que se vendiera en los concesionarios y el resultado es el que veis en las imágenes.

Por fuera, el diseño del Seat Toledo Podium -así fue bautizado- era discreto, pero presentaba novedades. La más clara era la pintura, que en estas unidades estaba formada por dos tonos de gris. Además, se añadieron varias placas identificativas de este acabado especial en zonas como las taloneras.

Más allá de esto, el aspecto era el mismo que el de cualquier otra berlina del acabado GT, con los mismos paragolpes y las llantas de cinco radios características. Eso sí, era en el habitáculo donde se podía percibir claramente que este no era un coche convencional.

El interior del Seat Toledo Podium estaba repleto de lujo en aquel momento. Se utilizó el cuero de color crema para la tapicería, se añadieron detalles de madera en zonas como el volante y la palanca de cambios e incluso se instalaron unas alfombrillas con la inscripción ‘Podium’. Asimismo, todo esto estaba acompañado de un equipamiento de lo más completo.

Además de los elementos habituales del Toledo GT, estas unidades contaban además con un sistema de sonido con 6 altavoces, un teléfono integrado en el reposabrazos del conductor -porque sí, entonces se podía usar el teléfono al volante- e incluso un fax en el maletero -en la foto, no original-. Sí, un fax. ¿Hay algo más noventero?

En aquel momento, esta edición especial contaba con un verdadero acabado premium. Por ello, aunque aspectos como la mecánica permanecieron sin cambios -bajo el capó estaba el motor 2.0 de 8 válvulas con 115 CV-, era una versión de lo más atractiva.

Aun así, eso no importaba, ya que no estaba a la venta. Como he dicho, se creó para los medallistas españoles, de manera que se fabricaron tan solo 22 ejemplares, los cuales fueron entregados a los atletas tras los Juegos Olímpicos de 1992. También hubo una unidad 23, eso sí, la cual estaba destinada a ser almacenada en la nave A122 de Seat.

Entrega de un Seat Toledo Podium

Ahora bien, ¿qué ha sido de estos coches? A fecha de hoy, se sabe de la existencia de dos Seat Toledo Podium. Uno es el de la propia marca y el otro se encuentra en la colección ‘Seat en Rodaje’ -en las imágenes propias-. Por lo tanto, lo que se podría decir en 1992 ahora es una realidad: se trata de uno de los Seat más exclusivos que existen.