La historia del Ferrari F40 que Diego Maradona quiso devolver
El pasado 30 de octubre, Diego Armando Maradona, el astro del fútbol argentino, cumplió 58 años. Maradona es un personaje cuya vida está repleta de anécdotas de diversa índole, algunas cuestionadas y otras, especialmente las que ocurrieron dentro de los campos de fútbol, admiradas durante décadas. Hoy te traigo la historia del Ferrari F40 que Diego Maradona quiso devolver.
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Antes de que se disputara el Mundial de Fútbol de 1986 en México, donde Argentina sería la ganadora y el mejor jugador Maradona, el entonces jugador del Nápoles le pidió a su representante, Guillermo Coppola, un Ferrari F40. El futbolista quería algo particular, ya que por entonces tenía un Ferrari Testarrosa, por lo que le exigió a su representante que el superdeportivo italiano debía ser de color negro.
Diego Maradona y el Ferrari F40 negro
Coppola se reunió con máximos responsables de Ferrari, entre lo que se encontraba un Enzo Ferrari que moriría tan solo dos años más tarde. La firma italiana tan solo producía el ejemplar en rojo y raramente en otro color. Negro no estaba en su agenda, por lo que el representante tuvo que hacer uso de todo su ingenio y contactos para conseguir que el F40 finalmente fuera negro a petición de Maradona.
Tras conquistar el Mundial de México de 1986 y ser elegido el mejor jugador del mundo, Maradona volvía en un avión privado desde Roma a Nápoles. En el aeropuerto, Coppola le esperaba, junto a Corrado Ferlaino, entonces presidente del Nápoles, junto al deseado Ferrari F40 Negro que el futbolista había pedido unos meses antes.
Coppola cuenta en el vídeo más arriba cómo consiguió que Ferlaino pagara, no solo el coste del coche, sino un importante suplemento como regalo para Maradona. “Yo hice que Corrado Ferlaino pagara el Ferrari que le conseguí a Maradona y que para esa época era impensable tener. Valía 430.000 dólares. Le pasé el doble del gasto y le sumé 130.000 dólares de la pintura. Ferlaino terminó aceptando porque le prometí que iba a recuperar su dinero con un amistoso”, explicaba Coppola en una entrevista con TyC Sports.
Sin radio ni tapicería en las puertas
Cuando Diego Maradona aterrizó, vislumbró el Ferrari en la pista junto a Coppola y el presidente del Nápoles. Contento con el espectacular coche, su representante le hizo saber que Ferlaino había pagado el vehículo como un regalo al mejor jugador del mundo. Maradona quiso ir a dar una vuelta, y allí descubrió lo que no le terminaba de gustar en el F40.
“Nos subimos los dos y (Maradona) empezó a mirar para todos lados. Le digo ‘¿qué pasa’. Y contesta: ‘¿Y el estéreo?’. Le digo: ‘¿cómo estéreo? No tiene estéreo… Es un coche de carreras, no tiene estéreo, no tiene aire acondicionado, no tiene nada’. Y me dice: ‘bueno, entonces que se lo metan en el culo’. Ferlaino no lo podía creer…”, explicaba Coppola.
Durante la entrevista, Guillermo Coppola explicó que Maradona finalmente se quedó con el Ferrari F40 Negro, pero tuvieron que instalarle posteriormente un equipo de sonido y el tapizado de las puertas.
Fuente: TyC Sports