Un Volvo abandonado en una isla en medio de un lago: el último descubrimiento en Google Maps es de lo más intrigante

Volvo abandonado Google Maps lago

Un misterioso Volvo descansa desde hace años en un lugar de apariencia imposible en un lago de Illinois (EEUU)

Puede que seas de los que viajan sentado en su sofá. No, no porque tenga ruedas, sino porque tienes un smartphone con Google Maps: lo abres, seleccionas una ubicación al azar y utilizas la vista Street View para ver los coches aparcados, las casas, las calles...

Seguramente, incluso conoces foros y webs que ofrecen lugares extraños o inquietantes. Por ejemplo, mis compañeros de Business Insider España recopilaron 10 de ellos (y utilizan una imagen de apertura de lo más inquietante).

Ahora puedes añadir una más a la lista: un Volvo S80 abandonado en una pequeña isla de poco más de cinco metros en medio de un lago ubicado cerca de Chicago, en una ciudad que se llama Ottawa (aunque no es la canadiense) y que los usuarios han bautizado como la Isla Volvo.

Isla Volvo Google Maps

El "descubrimiento" lo hizo un aficionado a buscar cosas estrambóticas en Google y pronto se puso manos a la obra para averiguar el origen de tan sorprendente ubicación.

El lago surgió de manera artificial en una explotación minera (suele ocurrir que las excavaciones llegan al nivel freático y se generan lagunas artificiales). 

Ahora tiene algo más de 10 metros de profundidad y en uno de sus puntos se quedó esta pequeña elevación que apenas levanta unos centímetros del nivel del agua.

El lago está en una propiedad privada, informa el diario Mirror, que pertenece al dueño de un par de talleres en la zona. Este hombre parece ser que tiene ideas de lo más llamativo para promocionar sus negocios.

Una de ellas consistió en colocar ahí el misterioso Volvo: antes, la isla era una pequeña península a la que llegó el coche rodando. Una vez colocado, se quitó la parte que la unía a la tierra.

¿El objetivo? El empresario local tuvo la idea de convocar un concurso para que la gente descubriera cómo había llegado el coche hasta allí, aunque luego dio marcha atrás por miedo a la que la gente hiciera cosas locas que pusieran en riesgo su integridad. 

¡Ah, Estados Unidos! El país de las demandas millonarias...