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Según varias religiones dhármicas, el karma es una energía trascendente que se genera a partir de los actos de las personas. También conocido como un espíritu de justicia y/o equilibrio. Según Fisker, el Karma es un vehículo híbrido que llegó al mercado europeo en 2011 y que en 2016 se rebautizó como Karma Revero, y más tarde, Revero GT. En la actualidad se conoce como Karma GS-6.

Habida cuenta que la existencia de este coche es corta y que en España tuvo muy poca repercusión, convendría plantearse varios factores. ¿Compensa comprar un modelo de segunda mano o es mejor ir directamente a uno nuevo? Veamos 'pros' y 'contras' y si nos cuadran los chakras a la hora de adquirir este modelo:

• Los buscadores de vehículos usados ofrecen este peculiar eléctrico que, en su gran mayoría, llegan desde fuera de España, lo que encarece la operación por los gastos burocráticos. 
• Otro punto es que muchos de ellos sobrepasan los 50.000 km, lo que mucha gente desechará porque no les compensa. 
• El tercero es el tiempo de recepción del coche. En España el GS-6 todavía no ha aterrizado como tal, con lo que la opción de un Fisker Karma de segunda mano parece más viable, aun llegando desde cualquier punto de Europa.
• Y el cuarto, en caso de que te decidas por uno nuevo, el GS-6 que llegaría desde Estados Unidos, deberías pagar 83.900 dólares (69.190 euros al cambio), más gastos de aduanas, etc.

Francia, Alemania, Suecia, Holanda o Italia son los países donde podrás encontrar el Karma de segunda mano. Los precios oscilan entre los 37.500 euros de un vehículo con 125.000 km, hasta los 59.000 de uno con 7.000 km. Todos ellos matriculados de 2012 en adelante. En nuestro país los modelos están contados, pero haberlos, haylos. Sólo hay que buscar en la red.

Todo depende de la cuenta corriente de cada uno, pero si miramos el ahorro de euros está claro que es mejor comprarlo en España o Europa, que puedes tener aquí en unos días o semanas, que esperar a que llegue desde el otro lado del Atlántico.

Cuatro generaciones

Este coche de la compañía estadounidense ha tenido cuatro generaciones desde que en 2011 apareciese en el mercado. La primera fue el Fisker Karma, la segunda el Karma Revero, la tercera el Karma Revero GT y la última el Karma GS-6.

El primer vehículo de la saga, el Karma, se presentó, en principio, con unas características técnicas definidas. Es un automóvil de tracción trasera y tiene dos motores eléctricos que dan una potencia máxima conjunta de 300 kW (408 CV), con un par de 1.300 Nm. Están ubicados en la parte posterior del vehículo. 

Además, lleva un motor de gasolina turboalimentado 2.0 de 260 CV, que mueve un generador eléctrico cuando las baterías de los motores están descargadas o cuando se precisa más potencia.

Posteriormente llegaría el Karma Revero. Lo hizo con un propulsor eléctrico con extensor de autonomía propulsado por un sistema que suma una potencia de 301 kW (410 CV) que aceleran de 0 a 100 km/h en unos 5.5 segundos. Ligeramente más rápido que la anterior versión, y hasta una velocidad máxima limitada a 200 km/h.

Se alimenta de una batería de litio que incrementa ligeramente su capacidad, de los 20.4 kWh a los 21.4 kWh. Esta le permitirá aumentar la autonomía según el fabricante hasta los 80 kilómetros con cada carga. 

El motor gasolina que hace las veces de generador es un propulsor procedente de General Motors. Una mecánica turbo de 4 cilindros con 175 kW (282 CV) de potencia que le permite incrementar la autonomía, y mantener unos elevados niveles de prestaciones, cuando se termine la carga de la batería.

Posteriormente vio la luz el Revero GT, que estrenó motores. Por un lado nos encontramos con dos nuevas unidades eléctricas acoplados a las ruedas traseras que ahora entregan 542 CV y 746 Nm de par máximo, en lugar de los 409 CV que entregaba el Karma Revero original. 

De igual manera, la marca sustituyó el motor de 4 cilindros de 2.0 litros gasolina de origen General Motors por un nuevo bloque tricilíndrico de 1.5 litros, el mismo que monta el BMW i8.

Fisker Karma GS-6, el último en llegar

Y el último en llegar fue el Karma GS-6. Es un sedán que se impulsa gracias a dos motores eléctricos cuya batería se puede recargar enchufada a la red o a través de un propulsor térmico que acciona un generador de energía. Su potencia es de 544 caballos y tiene una autonomía total de 531 kilómetros.

El nuevo Karma GS-6, que se va a vender en Europa, presenta dos versiones, una totalmente eléctrica llamada GSe-6, y otra eléctrica de rango extendido. 

El conjunto mecánico del Karma GS-6 está formado por dos motores eléctricos y uno térmico. Los primeros, dispuestos sobre el eje trasero, entregan cada uno 272 caballos, con lo que la potencia total es de 544. La transmisión es de una única relación. El par máximo es de 746 Nm.

La batería que alimenta estos motores es de iones de litio y tiene una capacidad de 28 kilovatios hora. Para recargar la batería está el motor térmico, que es un 1.5 litros de tres cilindros turbo con 231 caballos de potencia.