Rayos láser en el parabrisas. Así, como suena. Es una solicitud de patente de Tesla que se hizo en 2019 ante la oficina de Estados Unidos y que ahora ha salido a la luz otra vez porque ha sido aprobada hace unos pocos días. Más allá de un titular en el que uno se puede imaginar al Capitán Spock ordenando disparar a una nave Klingon, tiene aplicaciones interesantes.

Por ejemplo, según explican desde Carglass (sí, donde trabaja Joseba), se podrían utilizar para limpiar superficies acristaladas. Así se podría prescindir por ejemplo de los limpiaparabrisas, por lo que la aerodinámica podría mejorar.

Un vistazo al texto presentado por Tesla ante la oficina americana arroja algo más de luz: "Un sistema de limpieza para vehículos" que incluye un aparato que emite un rayo láser "para irradiar una región en una luna del vehículo". 

El funcionamiento sería así, según el texto de la marca: 

"El circuito de control analiza un conjunto de parámetros asociados con el rayo láser emitido que está basado en la detección de la suciedad acumulada en cualquier parte del parabrisas. Una centralita controlaría el nivel de exposición de esa zona y mandaría un haz de láser controlado que sería capaz de penetrar en el cristal y eliminar los residuos acumulados".

No parece que tenga sentido un sistema tan caro para algo que se soluciona con un puñado de dólares (saludos a los amantes del western). 

Por eso, más allá de la limpieza pura y dura, otras aplicaciones que puede tener es la de limpiar las infinitas cámaras que van a necesitar los coches para hacer funcionar los sistemas de ayuda a la conducción (ADAS) y hasta para mantener en buen estado los paneles solares que montarán en un futuro.

Como cuentan los especialistas en lunas de vehículos, esto podría permitir colocar dichas cámaras de los sistemas ADAS más arriba, algo que ahora está marcado por la posición de los limpias.

En todo caso, no es la primera vez que en la marca americana desarrollan sistemas (que luego no tienen porqué tener aplicación final) relacionados con el parabrisas.

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Hace poco salió a la luz un sistema que utilizaba una especie de limpiaparabrisas único que barría la luna lateralmente. Esto puede estar encaminado precisamente a lo mismo que los rayos láser: a mejorar la superficie de limpiado para colocar los sensores de los ADAS más arriba.

También, hace relativamente poco solicitaron la patente de un parabrisas que detectaba automáticamente daños y era capaz de ponerse en contacto con el taller para solicitar una cita. Combinado con la conducción autónoma, el eléctrico podría ir solo a reparar y volver a casa mientras el dueño prepara un sabroso pastel de arándanos...

Si veremos finalmente esta aplicación en un coche, al menos a medio plazo, es algo que no se puede decir. En todo caso, muestra el camino de la marca de Palo Alto (California) para encontrar una visión (nunca mejor dicho) diferente a los diversos obstáculos que se encuentra en el desarrollo de sus productos.