La inclinación de Alfa Romeo por los coches deportivos a lo largo de su historia ha sido clara, y gracias a ella se han visto coches realmente icónicos salir de las fábricas italianas. Uno de esos grandes nombres es el Alfa Romeo Giulia GT en sus diferentes versiones.

Inicialmente, el mayor logro de Alfa Romeo fue con el GTA: una edición especial de 500 unidades derivado del Giulia GTA 1600 de finales de los 60' y enfocado en la competición, aunque se terminaron homologando diferentes versiones stradale.

Poco después aparecieron los Alfa Romeo Giulia GT Veloce (GTV), un gran turismo fabricado entre 1967 y 1977 que contó con dos generaciones: el Giulia GTV 1750 hasta 1971 y el Giulia 2000 GTV desde aquel año hasta el final de la saga.

Se trata de coches clásicos muy cotizados en la actualidad. Las versiones GTA y GTAm de finales de los 60' pueden superar los 180.000 euros de precio, mientras que los GTV oscilan entorno a los 70.000 euros. 

La estética era muy similar a la del Giulia, pero con una carrocería más baja, agresiva y reconvertida en coupé que fue diseñada por Giorgetto Giurgiaro, de Carrozzeria Bertone. La empresa también influyó en multitud de aspectos del interior, como el cuadro de instrumentos y la zona del salpicadero.

Sus motores fueron de 4 cilindros en línea y tuvieron cubicajes comprendidos entre los 1,6 y 2,0 litros en las citadas versiones, con potencias de hasta 160 CV e incorporando incluso opciones sobrealimentadas.

Alfa Romeo Giulia Quadrifoglio, GTA y GTAm modernos

Tomando como inspiración al Alfa Romeo Giulia GTA de competición (una variante de estética similar a los dos modelos ya mencionados y de edición limitada), la marca italiana ha lanzado desde 2015 tres versiones deportivos de su nuevo Giulia.

En 2015 se presentó el Alfa Romeo Giulia Quadrifoglio, con un motor V6 a 90º biturbo de 2,9 litros derivado directamente de la arquitectura Ferrari con 510 CV y 600 Nm de par máximo. Su estética pasó a ser de carrocería berlina, pero conservando muchísimos elementos clásicos.

Entre ellos, la clásica parrilla de triángulo invertido con ópticas que mantienen detalles redondos. También destacan las anchas aletas laterales y la forma general con el habitáculo bastante centrado, manteniendo proporciones similares entre el capó y el maletero.

En este Quadrifoglio, la guinda del pastel fue el motor Ferrari y su ronco sonido, que enamoró a todos aquellos que han tenido la oportunidad de conducirlo.

Por el 110 aniversario del nacimiento de la marca, nacieron en 2021 los Alfa Romeo Giulia GTA y GTAm (modificata). El público esperaba un gran motor del Cavallino Rampante, pero Alfa Romeo optó por una unidad de potencia propia V6 biturbo de 2,9 litros capaz de desarrollar 540 CV y 600 Nm de par.

La estética ha ido un paso más allá, añadiendo multitud de elementos aerodinámicos en fibra de carbono como splitter, difusores y diferentes tipos de alerón. Además, los interiores se han simplificado (dentro de ese lujo que ya los caracterizaba) para acercarse al mundo de la competición, con elementos como la jaula antivuelco del GTAm.

Estos dos modelos son capaces de alcanzar los 300 km/h de velocidad máxima, frente a los 307 km/h que obtenía su predecesor. Sin embargo, son más rápidos en el 0 a 100 km/h, con el GTA consiguiendo la marca en 3,6 segundos (0,3 segundos más rápido que su homólogo de motor Ferrari).

En cualquier caso, la continuación de esta saga por parte de Alfa Romeo está siendo digna de los libros de historia. No renuncian al diseño, a la deportividad ni a su herencia histórica. Tomar el pasado para avanzar en el futuro y hacer que el público sienta lo mismo que hace 40 años.

Eso es un verdadero reto, y en el trébol son expertos en producir esos sentimientos. ¿Lo próximo? No lo sabemos, pero sí está claro lo que debería ser: el retorno de un Alfa Romeo 8C. Tiempo al tiempo.