El Aston Martin DB5 cumple 60 años

Aston Martin DB5 y DB12

Gustavo López Sirvent

Este icónico modelo fue uno de los coches más idolatrados de la industria automotriz en los años 60. De hecho, fue el coche que utilizó James Bond en la saga 007. Paul McCartney, George Harrison o Mick Jagger han tenido en sus garajes este modelo que, hoy en día, continúa siendo sinónimo de exclusividad

Los símbolos, ya sean de la naturaleza que sean, siempre quedarán almacenados en la memoria colectiva por tener rasgos especiales que les hacen ser diferente, originales. Ese es el caso del Aston Martin DB5, quizá el coche más representativo de la marca y que en la actualidad va a cumplir 60 años.

Fue en 1963 cuando este modelo empezó a brillar con luz propias en la industria automotriz y que serviría a la compañía británica para consolidarse como una de las marcas de lujo más deseadas del Reino Unido.

Seis décadas después, el DB5 sigue siendo uno de los coches más idolatrados y reconocibles del mundo. Este modelo fue el protagonista de la presencia de Aston Martin en el festival Goodwood Revival de Sussex, junto a la última incorporación a la venerada estirpe DB de la marca, el primer superturismo del mundo, el DB12. Ambos posaron para celebrar el histórico aniversario.

Reflexionando sobre el eterno atractivo del DB5 en su 60 aniversario, Lawrence Stroll, Executive Chairman de Aston Martin y propietario de un DB5, declaró: "La era de David Brown nos dio grandes deportivos Aston Martin, pero ninguno es tan reconocido, venerado y deseado como el DB5, que sentó las bases de nuestra identidad como marca de lujo, sinónimo de estilo, prestaciones y exclusividad”.

"Es justo que, al cumplir 60 años, nos tomemos un momento para echar la vista atrás y reflexionar sobre el increíble papel de este coche en nuestros 110 años de historia. Estamos orgullosos de que el linaje DB continúe hoy con el DB12, que como los que vinieron antes, es una celebración de todo lo que amamos de los deportivos británicos construidos a mano", agregó.

Un icono de los años 60

Como decíamos antes, fue en el año 1963 cuando Aston Martin disfrutaba de una gran popularidad y su DB4 se vendía muy bien desde su presentación en 1958. Sin embargo, con la fuerte competencia de los fabricantes de deportivos de lujo tanto en su país como en el resto del continente, se necesitaba algo nuevo para mantener la marca en lo más alto.

En su presentación oficial al público en el Salón del Automóvil de Frankfurt en septiembre de 1963, el recién llegado presentaba varios cambios de diseño, técnicos y de equipamiento con respecto a su predecesor -sobre todo un importante desarrollo del motor que proporcionaba más potencia- que justificaban el uso de un nombre totalmente nuevo en el mundo del automóvil de la época.

La berlina y más tarde el descapotable que llevaban este inconfundible nombre, se produjo en la fábrica y sede de la marca en Newport Pagnell, Buckinghamshire, durante poco más de dos años, pero en ese tiempo se forjaron una reputación y una fama que, hoy en día, los convierten en uno de los coches más deseados de todos los tiempos.

No hay duda de que la decisión de los cineastas de EON Productions de poner al agente secreto más conocido del mundo al volante del nuevo DB5 en la saga de películas de James Bond a lo largo de más de medio siglo, ha consolidado su lugar en el salón de la fama del automóvil. Pero 007 no es ni mucho menos la única "celebridad" a la que se ha visto al volante de este emblemático Aston Martin.

Entre los célebres propietarios del DB5 en la década de 1960 se encuentran Sir Paul McCartney y George Harrison, de los Beatles, y Mick Jagger, de los Rolling Stone. El maestro de la comedia Peter Sellers también adquirió el modelo. 

Durante los años posteriores, nombres reconocidos -desde Robert Plant y Jay Kay hasta Elle McPherson y Ralph Lauren- han asegurado que tanto las versiones berlina como descapotable del coche rara vez han dejado de ser el centro de atención.