Antoine Lavoisier, padre de la química moderna, ya lo dijo: "la energía no se crea ni se destruye, sólo se transforma". Y a fe que se está transformando. Gasolina, diésel, electricidad y energía sintética son los elementos químicos que están moviendo coches, camiones, trenes, barcos o aviones. Y ahora la lucha llega para ver cuál es la menos contaminante, ya que el planeta está gravemente herido.

Entretanto, los mortales vamos asfixiados por ver cómo sube el carburante día sí y día también. Otros, como la casa Audi, ya piensan en mejorar nuestro futuro a través de combustibles más sostenibles. Desde la compañía alemana evalúan la opción de fabricar motores sintéticos (los llamados e-fuel), pero que sirva como paso previo a los propulsores eléctricos. 

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“Los combustibles sintéticos son solo una tecnología puente para nosotros”, dijo recientemente a TopGear.com el jefe de desarrollo técnico de Audi, Oliver Hoffmann. “Para otras industrias (barcos y aviones, etc.), esta puede ser una solución para el futuro. Nuestro futuro, y para ser honestos, el futuro de la movilidad personal, serán los vehículos eléctricos de batería”, añadió.

Para ser justos, eso es algo que esperábamos desde hace mucho tiempo, y la firma teutona ya había dicho que dejaría de producir nuevos motores de combustión interna para fines de 2026. El trabajo realizado por Porsche en combustibles sintéticos había dado esperanzas para apostar por esa energía, pero no. Sólo se quedó en eso, en esperanza.  

Hoffmann afirmó que el problema con el combustible sintético no era la tecnología en sí, sino que era necesario producirlo de la manera más ecológica posible. También dijo lo mismo sobre la energía del hidrógeno. “La tecnología del hidrógeno no es ciencia espacial. Podemos desarrollar esta tecnología, pero el problema es obtener hidrógeno verde", indicó. 

El resumen de todo lo comentado pasa por enchufarnos a la luz y dejar de maltratar al planeta con el CO2. “La forma más eficiente para nosotros de reducir las emisiones de CO2 es la movilidad eléctrica a batería”, aseveró el jefe de desarrollo técnico de la marca de los cuatro aros.

Sin embargo, eso no quiere decir que Audi quede completamente al margen de los combustibles sintéticos. La semana pasada dejó caer algún rumor sobre formar un equipo en Fórmula Uno con este tipo de combustibles. 

Además, este deporte ya está listo para cambiar a nuevas unidades de potencia en 2026. Será entonces cuando cuenten con más asistencia eléctrica y funcionen con un combustible sostenible hecho de biorresiduos.

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¿Qué es el combustible sintético?

El e-Fuel o carburante sintético es un carburante líquido, similar al que conocemos en la actualidad. La gran diferencia es que no procede de fuentes de energía fósiles. Se obtiene de un proceso químico a partir del hidrógeno y la energía que se utiliza para su fabricación es renovable. De esta forma, se trata de un combustible 100% limpio.

Para crear los e-Fuels, el propio gas de efecto invernadero actúa como materia prima. El primer paso es adquirir hidrógeno del agua, separándoles mediante la técnica de la electrólisis. Para ello se utiliza energía procedente de fuentes renovables.

Posteriormente, se añade carbón para generar un combustible líquido. Dicho carbón puede obtenerse o bien a través del reciclado del mismo en los procesos industriales o capturándolo del aire gracias a filtros especiales. Cuando combinamos el hidrógeno y el dióxido de carbono (CO2) obtenemos el combustible sintético (metano). Este puede ser gasolina, diésel, gas e incluso queroseno.