Porsche celebra un triple cumpleaños en la Reunión de los Socios de Goodwood

Porsche 911 de tres décadas en Goodwood

Gustavo López Sirvent

La marca alemana cumplió 75 años construyendo deportivos, 100 años participando en las carreras en Le Mans y 60 años del Porsche 911. Por este motivo llevó hasta West Sussex 19 modelos de esta gama de tres décadas que dejaron boquiabiertos a los presentes.

Se antoja prácticamente imposible que en un mismo evento se den conjuntamente tres efemérides de una de las marcas más importantes de la historia, Porsche: la marca alemana cumplió 75 años de deportivos, 100 años de carreras en Le Mans y 60 años del Porsche 911. Este triple cumpleaños sucedió el pasado fin de semana en la 80ª edición de la Reunión de Socios de Goodwood.

Por este motivo, la firma de Stuttgart tiró de poderío e historia y congregó en West Sussex a 19 vehículos que abarcaban tres décadas. Con la colaboración de Porsche Cars Gran Bretaña, el departamento de Museo y Patrimonio de Porsche y el equipo de Goodwood estos coches clásicos realizaron demostraciones a gran velocidad. Era la historia del 911 en sus múltiples formas.

Mucha gente pasó por el el paddock para admirar embobados modelos como el 911 Carrera 2.8 RSR con los colores de Martini. Hace cincuenta años, con este coche dotado de un alerón trasero experimental "Mary Stuart", Gijs van Lennep y Herbert Müller lograron una histórica victoria en la Targa Florio y un notable cuarto puesto absoluto en Le Mans.

En el trazado de Goodwood se expusieron tres ejemplares de su sucesor: el impresionante 911 RSR 3.0 de 1974; el inconfundible 911 RSR Turbo del museo, con el que Van Lennep y Müller lograron el segundo puesto en Le Mans ese mismo año; y el 935 Turbo de 1976, que se basó en el 911 Turbo gracias a las modificaciones que hubo en el reglamento y que le permitieron efectuar modificaciones. 

Esta evolución sofisticada y turboalimentada del Porsche GT refrigerado por aire se anotaría innumerables victorias. Las cuatro unidades privadas del Porsche 935 estuvieron flanqueadas en el condado de Sussex por otro de los favoritos del público: el temible y potente 935/78 de cola larga, más conocido como "Moby Dick".

Cuatro 911 GT2 R de la generación 993 fueron el complemento perfecto a otra pieza del Museo Porsche: el 911 GT1 '98. Hace 25 años, este portento tecnológico brindó a Porsche su 16ª victoria absoluta en Le Mans.

También se encontraba allí Neel Jani, antiguo piloto oficial de Porsche y ganador de Le Mans en 2016. El suizo se mostró abrumado por su primera experiencia con los 845 CV del 935/78: "Este sigue siendo el 911 más potente jamás construido", afirmaba el campeón del WEC.

Según relató, el poderío de ese coche se siente "cuando el turbo da todo su empuje". El piloto helvético hizo reverencia a los pilotos que llevaron este coche hasta la meta de Le Mans. 

"Es un esfuerzo físico completamente diferente al del 919 Hybrid con el que competimos. Tienes que mover el coche con los músculos, asegurarte de que engranas bien las marchas y de que no te pasas de revoluciones, algo que puede ocurrir fácilmente. Cuando llega el impulso, tienes que cambiar muy rápidamente. Ha sido una experiencia fantástica", argumentó.

Momentos como la 80ª Reunión de Socios de Goodwood sirven como valiosos recordatorios, tanto para los pilotos como para los espectadores, de la magnitud de esta historia en competición, de la pasión y el entusiasmo que perduran por el 911. Emoción, vivencias e historia a raudales.