Opinión: ¿se están convirtiendo los coches en smartphones con ruedas?
Seguro que ya te has dado cuenta: los coches se están convirtiendo en smartphones con ruedas. El futuro manda y los fabricantes de automóviles están adaptando sus creaciones a las nuevas tecnologías para no quedarse fuera de onda.
El último ejemplo de esto lo he vivido hace unos días, cuando tuve la oportunidad de asistir a la prueba del Citroën C3 Aircross, el nuevo SUV de la marca francesa que, como parte de su equipamiento, cuenta con una superficie de carga inductiva para smartphones. ¡Qué avanzado elemento!
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La parte positiva de esta plataforma es que es un buen intento para simplificar tu vida: ya no pasará nada si te olvidas el cable para cargar el móvil en casa, por ejemplo, y no tendrás que ir pendiente de él… Lo malo, que solo podrás utilizarlo si tienes un teléfono que te permita hacerlo, como es el caso del iPhone 8, un aparato con un precio que no está al alcance de todos los bolsillos… ¿Dónde está la lógica?
Queda claro que cada vez toma más relevancia en los coches nuevos la parte digital y/o tecnológica y, por tanto, ya es prácticamente imposible pensar en comprar un coche sin detenerse a observar si tu teléfono móvil será compatible o no con el sistema de infoentretenimiento que el vehículo incorpora (y no para jugar al Doom II en un Porsche 911, como ha ocurrido).
Si eres de los que se resistió a la llegada del Whatsapp o piensas que nada te obligará a cambiar tu viejo móvil por uno que sea capaz de reconocer tu cara en el futuro o de recargarse solo… puedes estar ante un serio problema. Y es que los coches están planteando un reto importante: algo así como “o te mueves, o caducas”.
Conectividad 4G, pantallas como la del BMW Serie 7 que se pueden controlar con sencillos gestos para que el conductor no pierda de vista la carretera, aplicaciones que con un solo ‘click’ te permiten buscar la plaza de aparcamiento libre más cercana… Estas son algunas de las tecnologías más requeridas hoy en día.
Desde luego, la creación de coches conectados no ha sido en balde. En muchas ocasiones (la mayoría me atrevería a decir) la principal función de estos smartphones con ruedas es aumentar la seguridad al volante y permitir una conducción más eficiente a través de la movilidad sostenible.
Sin embargo, todo esto también entraña un riesgo importante: el hecho de que ni en el coche seamos capaces de desconectar y prestar atención a algo tan importante como es la carretera. Hacer un uso prudente de las tecnologías al volante es fundamental y es algo de lo que debemos tomar conciencia… ¿está todo el mundo preparado para esto?
Al estarse convirtiendo el coche en un smartphone, los problemas de seguridad son algo real que muchas marcas como Tesla ya se han propuesto afrontar... ¿sabías que el grupo Fiat Chrysler busca hacker? Un ciberataque puede convertirse en algo muy peligroso y más cuando hablamos de vehículos conectados, pues puede poner en riesgo muchas vidas…
Está bien, todo esto es un poco catastrofista... pero la situación es real. Sin embargo, como en todo, hay que saber dónde están los límites. Puede que no podamos hacer nada por evitar la digitalización de los coches (¡puristas del mundo, ha llegado la hora de adaptarse!) pero sí que está en tus manos hacer un uso inteligente de ello. ¡Sé más listo que tu coche!
