Probamos el Porsche 911 Dakar: está prohibido aburrirse

Prueba del Porsche 911 Dakar
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Hemos conducido el Porsche 911 Dakar, la versión offroad del icónico deportivo alemán. Sí, es tan divertido como parece.

Lo admito. Soy un afortunado por ser una de las pocas personas que puede probar el Porsche 911 Dakar, ya que se trata de uno de los deportivos más especiales del momento. Limitada a 2.500 unidades e inspirada en el Porsche 911 que ganó el Rally París-Dakar en 1984, esta es la versión más polivalente del deportivo alemán y voy a poder experimentarlo en la nieve.

Fue hace pocos meses cuando Porsche dio a conocer esta configuración especial de su modelo más icónico, esta vez con carácter off-road. Como otros, quedé muy sorprendido cuando esta variante salió a la luz y algo me dice que lo estaré aún más tras situarme detrás del volante. Para ello, me he desplazado hasta la localidad austríaca de Muhr.

En Madrid nos quejamos estos días del frío, pero aquí ese concepto tiene otro significado. Todo está cubierto por un manto blanco, las temperaturas apenas superan los 0º en mitad del día y el aire es capaz de dejarte helado si no te cubres absolutamente todo el cuerpo. Está claro que estaré más cómodo en el interior de un coche, pero ¿cuál cojo?

Diseño e interior del 911 Dakar

Frente a mí tengo varias unidades del 911 Dakar, con todas las variantes disponibles. Hay una unidad pintada en Shade Green Metallic con la baca del techo opcional con iluminación incorporada -puedes añadir incluso una tienda de campaña-, pero también hay diseños icónicos. Por ejemplo, están las decoraciones recién añadidas de Martini -Rallye 1978-, Rallye 1971 y 1974. 

Sin embargo, tras meditarlo detenidamente, me decanto por una unidad con el Pack Rallye Design, el cual suma 29.729 euros a la factura. ¿Y qué recibes por ello? Básicamente, una decoración que imita la de Rothmans que portaba el coche ganador del Dakar en 1984. Eso sí, ahora en las puertas pone “Roughroads” -carreteras en mal estado-, por ser la original una marca de tabaco…

Está claro que pagar casi 30.000 euros por este diseño de Porsche Exclusive Manufaktur es mucho dinero, pero reconozco que le queda genial a un coche que ya es llamativo de por sí. De hecho, basta echar un vistazo al diseño del Porsche 911 Dakar para darse cuenta al instante de que este no es un modelo normal.

De entrada, la suspensión está elevada y es 50 mm más alta que la de un 911 Carrera con suspensión deportiva. Además, es posible elevarla en otros 30 mm en el modo Offroad, en el que podrás ir hasta a 170 km/h. Nada mal. Además, con una altura libre al suelo máxima de 19 cm, aquí hay mejores cualidades que en muchos SUV. 

También este es un coche más atractivo que un SUV, al menos en mi opinión. La silueta es la clásica del 911, pero se añaden detalles como un capó como el del GT3 y un alerón trasero hechos de polímero reforzado con fibra de carbono. Asimismo, hay numerosas protecciones en los bajos y en los pasos de rueda, ya que este coche está pensado para ir fuera del asfalto.

Para ello, además, cuenta con unas nuevas llantas que se envuelven en unos neumáticos desarrollados para este modelo: unos Pirelli Scorpion All Terrain Plus de 245/45 ZR19 delante y 295/40 ZR20 detrás. Son unas gomas reforzadas que, en teoría, incluso aguantan cortes. Sin embargo, dado que estamos en nieve y hielo, mi unidad monta unos Pirelli PZero Winter.

En definitiva, el paquete exterior es sorprendente y el interior no se queda atrás, donde hay un enfoque más deportivo. Aquí, me siento en unos asientos bucket calefactados, al igual que el volante. Tras ellos no hay asientos, sino una jaula antivuelco, algo que ayuda a dejar el peso en 1.605 kg.

Más allá de esto, lo cierto es que el interior del 911 Dakar no es tan diferente del de otro modelo de la gama. La disposición de los elementos es la misma, aunque hay detalles como el uso del material Race Tex, acentos en color blanco en el caso de esta unidad y la placa identificativa con la numeración del coche.

Por otra parte, en la consola central está el mando para subir y bajar la carrocería, mientras que al operar el mando de los modos de conducción veo dos nuevos: un Offroad y el denominado Rallye. El primero está ideado para subir en terrenos difíciles, pero el segundo está enfocado a la diversión y aporta más par al eje posterior. Esto me recuerda que este no es un 911 más.

Motor y prestaciones

Aun así, lo cierto es que la mecánica no es específica de este modelo. El motor del Porsche 911 Dakar es básicamente el de un Carrera GTS, siendo un seis cilindros biturbo de 3 litros con 480 CV de potencia y 570 Nm de par. Esta fuerza se maneja a través de un cambio PDK de 8 velocidades y se transmite a ambos ejes, así como contamos además con bloqueo de diferencial.

Con esto, las cifras oficiales señalan que este deportivo es capaz de pasar de 0 a 100 km/h en 3,4 segundos, con una velocidad máxima de 240 km/h. ¿Cómo? Puede que esta sea la variante más lenta de este modelo en los últimos años, pero lo cierto es que se ha limitado la velocidad debido a los neumáticos que monta. Aun así, estas cualidades deberían ser suficientes fuera del asfalto.

Prueba del Porsche 911 Dakar: bailando sobre el hielo

Prueba del Porsche 911 Dakar

Eso sí, para comprobarlo, es mejor ponerse en marcha. Por ello, me acomodo en el asiento bucket y arranco el motor, cuyo sonido envuelve todo el habitáculo al instante. Así, salgo con calma a la carretera, ya que me espera una ruta por carretera antes de llegar a un circuito creado en la nieve en la localidad de Muhr.

En mis primeros minutos al volante, circulo por ciudad y posteriormente salgo a la autopista. Lo que más percibo es el sonido del motor, que sube de decibelios al seleccionar modos de conducción como el Sport. Sin embargo, más allá de esto, todo se siente bastante suave.

Por ejemplo, la dirección se siente ligera y la suspensión absorbe los resaltos sin casi enterarme. Esa es su función, claro está, pero lo que quiero recalcar es la suavidad general, a pesar de que esta versión tenga un enfoque más deportivo que el de un 911 Carrera convencional. Por otra parte, el tacto del freno es más duro de lo que esperaba, pero no falta nada de eficacia. 

De la misma forma, por autopista todo se desarrolla también con tranquilidad, aunque el sonido del motor se note. No es un problema, ya que me encanta, pero esto ya son preferencias personales. En definitiva, es muy probable que esta variante se sienta como cualquier otra de la gama, aunque es cierto que la suspensión elevada resulta en una inclinación mayor en curvas.

Prueba del Porsche 911 Dakar

Aun así, esto no es un drama y para correr en asfalto hay otras configuraciones. El terreno predilecto del Porsche 911 Dakar es otro y ya he llegado a al circuito de nieve y hielo que me espera, escenario en el que este coche podrá brillar con creces. Conduciremos en dos tramos y tendremos a dos profesores de primer nivel: los pilotos Jörg Bergmeister y Walter Röhrl.

Comenzamos con el primero, donde repasamos el breve recorrido y vemos que tendremos una pequeña zona de esquiva y slalom entre conos. Selecciono el modo Rallye y empiezo a conducir, notando cómo el coche se desliza, pero dentro de una situación completamente controlable. Pronto me empiezo a sentir cómodo y puedo subir la velocidad, mientras el coche responde de maravilla.

Llegamos así a unos conos en los que tenemos que parar, antes de acelerar a fondo, frenar y realizar una maniobra de esquiva. Así lo hago y, a pesar de patinar por el hielo, todo está bajo control. Llego al punto marcado y freno con fuerza, pero veo que me voy recto. Eso sí, solo con levantar el pie y girar logro meterme por la zona exacta, y eso que pensaba que me pasaba de largo…

Repetimos el proceso varias veces, cada vez con más velocidad y me sorprendo de la estabilidad y seguridad que transmite el 911 Dakar en un terreno como este. Estoy bastante satisfecho y ahora toca ir con Röhrl, donde vamos a dedicarnos a controlar el coche de lado. Con el modo Rallye puesto, es hora de quitar el control de tracción.

Prueba del Porsche 911 Dakar

Manuel Hollenbach

No voy a mentir. Siento algo de tensión por derrapar en un coche de más de 250.000 euros y sin ser yo Keiichi Tsuchiya, pero no es momento de ponerse a dudar y es mejor estar concentrado. Así, tras algunas indicaciones del legendario piloto alemán, me pongo a ello y soy capaz de controlar el coche de lado sin grandes problemas.

Con este modo de conducción, se nota el mayor reparto de par hacia el eje trasero, pero esa tracción en el delantero sigue presente y eso ayuda a tener el control en todo momento. Poco a poco, la velocidad aumenta e incluso empiezo a enlazar curvas. Esto es lo más divertido que he hecho últimamente y, teniendo en cuenta las zonas con más hielo, no hay nada que temer.

Aquí, confirmo lo que ya estaba notando anteriormente al conducir el 911 Dakar. En carretera, el coche cumple de sobra y sigue sintiéndose como un Porsche, pero fuera de ella es donde sorprende. La estabilidad y el control son mucho mayores de lo que esperaba y es posible pasártelo en grande sin jugártela demasiado. Hay un problema, eso sí: ahora quiero uno.

Precio y rivales del 911 Dakar

Como he dicho antes, este coche cuesta más de 250.000 euros. En concreto, el precio del Porsche 911 Dakar es de 256.042 euros, aunque mi unidad asciende a unos 285.771 euros por el Pack Rally Design. Y eso, sin tener en cuenta extras como el de la baca del techo, que puede llevar hasta 42 kg…

Sin duda, es mucho dinero, pero no tienes que meditar si comprarlo o no porque ya están todos vendidos… No me extraña, la verdad, ya que he acabado muy contento con él. Para quien no ha podido hacerse con él, su rival más directo es el Lamborghini Huracán Sterrato, obviamente. Eso sí, costará más de 300.000 euros.

Conclusión

Prueba del Porsche 911 Dakar

Es una pena que lo más probable sea que la mayoría de los 2.500 Porsche 911 Dakar no vayan a circular demasiado, ya que es un coche realmente divertido y con más capacidades de las que se pueden adivinar a simple vista. En carretera no decepciona, aunque otras versiones puedan ofrecer un comportamiento mejor. Eso sí, fuera de ella es una máquina espectacular. 

Nuestro veredicto

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Etiquetas: Motor