Una start-up alemana convierte un coche con motor térmico a eléctrico en 24 horas

coche de e-Revolt

Gustavo López Sirvent

La empresa e-Revolt tiene un catálogo de 42 modelos de coches con los que monta un kit de talla única que se instala sin complicaciones. La transformación, en la que se incluye una pantalla multimedia para controlar la batería y demás funciones del vehículo, vale entre 12.000 y 15.000 euros.

La conversión de coches con motor de combustión interna a eléctricos es un hecho y se está aplicando en diferentes partes del planeta. Esa transformación suele durar meses por la complicación que lleva el proceso, pero ahora una start-up alemana ha dado con la tecla para realizar dicha metamorfosis en tan sólo 24 horas. 

La empresa en cuestión se llama e-Revolt y el secreto de su éxito se halla en que sus procesos de conversión se limitan a una serie de marcas y modelos en concreto. Esta compañía tiene en su catálogo de transformación 42 modelos diferentes. Entre los más conocidos están el Volkswagen Golf, el Seat León o el Audi A3, que comparten plataforma.

La fórmula para triunfar radica en utilizar un kit de talla única que se instala sin complicaciones aprovechando los apoyos comunes que ofrece el chasis de los coches de combustión ya citados. En ese paquete va incluida la batería, que según la empresa alemana, tiene una autonomía eléctrica de entre 250 y 300 kilómetros. Aun así, los ingenieros están trabajando en incrementar ese rango.

La start-up alemana utiliza una tecnología patentada de bastidor, motor y baterías, garantizando que la conversión realizada en los talleres certificados en su red sea legal y se ajuste a la normativa. Se busca ejecutar un trabajo escalable, rápido y que garantice la economía circular de los componentes que se vayan a utilizar.

¿Cómo se realiza el proceso de conversión?

El paso inicial es el lógico en estos casos. Tanto e-Revolt como el taller homologado para estas transformaciones estudiarán si se puede llevar a cabo la conversión. Cuando esté todo en orden, se retirará el motor viejo y los componentes que no se vayan a utilizar. 

Desde la start-up comentan que se comprometen a que esos motores térmicos tengan una segunda vida para que se reutilicen en otros menesteres o directamente se recicle. 

La compañía con sede en Dachau suministrará al taller todos los componentes que hagan falta para la transformación: el marco 'Plug and Play', el módulo e-CAN, tornillos, mangueras, el motor eléctrico y la batería. Todo ello se instalará siguiendo los estándares legales relacionados con los registros de vehículos.

Si te estás preguntando qué precio tiene esta operación, te diremos que el paquete eléctrico está  entre 12.000 y 15.000 euros. Además, incorporará en el salpicadero una pantalla nueva con un sistema multimedia desde el que acceder a las funciones del nuevo vehículo eléctrico, como el control de carga, autonomía restante, navegación, servicios conectados, etc.