Duesenberg es una de las marcas más apreciadas actualmente de coches clásicos. Un fabricante estadounidense que tuvo una corta vida, pero dejó una gran huella. Ahora, una de sus grandes piezas se va a exponer en un evento de RM Sotheby's: el Duesenberg Model SJ Mormon Meteor Speedster.

Duesenberg: la historia de una marca que fabricó solo 3 coches que valen millones

La marca de coches americanos fue un auténtico icono en la década de 1920 y obtuvo importantes victorias en competición como en las 500 Millas de Indianápolis, aunque esa efusividad decreció en favor de la fabricación de vehículos de lujo para la calle. Si bien, esta unidad dejó claro que jamás quisieron apartarse de las carreras y la velocidad.

Duesenberg Model SJ Mormon Meteor Speedster

Fred Duesenberg logró un hito de tecnología en 1932 con la presentación del modelo SJ sobrealimentado gracias a un sobrealimentador centrífugo diseñado por el mismo, capaz de comprimir el aire en el colector de admisión a seis veces la velocidad del motor. Ese 8 cilindros en línea desarrolló 320 CV de potencia.

Sin embargo, el querido ingeniero y cabeza de marca murió en 1932 en un accidente. Su hermano, Augie Duesenberg, era un experimentado diseñador de carrocerías y quiso mantener viva la llama de esos coches deportivos. Y el hijo de Fred, Denny, le ayudó a ello.

Querían batir el récord de velocidad máxima en tierra y el piloto Ab Jenkins fue el encargado de llevar la máquina, puesta a punto especialmente con una carrocería bastante aerodinámica y con forma de torpedo: el Model SJ Mormon Meteor Speedster.

Salinas blancas de Bonneville, 31 de agosto de 1935. Un calor abrasador en ese desierto blanco calentaba el ambiente. Y allí rugía en la lejanía aquel radical motor de 8 cilindros en línea de 7,0 litros sobrealimentado y puesto a punto con más de 400 CV para un vehículo de 2.177 kg de peso.

El circuito ovalado de Bonneville Salt Flats vio a Jenkins y su Duesenberg girar durante 24 horas y recorrer más de 5.000 kilómetros a una velocidad media de 218 km/h. Un récord que duró hasta 1961. Y también batió el récord de velocidad durante 60 minutos a 247 km/h.

Récord que, por cierto, poseía Auto Union (Audi actualmente) desde 1934 con Hans Stuck al volante del Alvus Ring, un bólido diseñado por un tal Ferdinand, que más tarde fundó Porsche. Una prueba del poderío de Duesenberg.

Para batir al Mormon Meteor Speedster, el capitán George ET Eyston y John Cobb instalaron un motor Rolls-Royce de aviación W12 de 24,0 litros atmosférico en un Napier-Railton y consiguieron superar la marca del fabricante. Algo a lo que Duesenberg respondió con un Meteor Speedster actualizado con otro motor V12 atmosférico de 26,0 litros de Curtiss Conqueror con 650 CV.

Una historia espectacular para un coche cuyo paradero es desconocido, aunque sí se sabe de la existencia de un Meteor Speedster actualmente que fue subastado en el año 2004 en Pebble Beach por un precio de 4 millones de euros. La misma unidad que ahora podrá verse expuesta en Miami gracias a su dueño particular.