GAC presenta el primer motor del mundo impulsado por amoniaco

motor impulsado por amoniaco

Gustavo López Sirvent

Es un propulsor de 2.0 litros que puede quemar amoniaco líquido de forma segura y efectiva produciendo 120 kWh de electricidad

La ciencia y la historia han demostrado que a base de prueba y error se pueden conseguir avances significativos. Cada vez son más las alternativas a los motores eléctricos. En esta, tu revista, te hemos presentado propulsores de hidrógeno, e-fuel, de estado sólido o de azufre. A todos ellos hemos de sumar ahora los motores movidos por amoniaco

Tal y como nos cuentan nuestros compañeros de Computer Hoy, la empresa china Guangzhou Automobile Group Co. (GAC) se ha puesto manos a la obra para desarrollar un motor que se pone en marcha gracias al amoníaco. Se va a implementar en turismos con el fin de buscar sostenibilidad a través de este compuesto químico. 

 Qi Hongzhong, responsable de investigación y desarrollo de GAC, señaló la importancia de usar el amoniaco como combustible. “Hemos superado el punto de dolor de que el amoníaco es difícil de quemar rápidamente y usamos el combustible en la industria de automóviles de pasajeros. Vale la pena anticipar su valor para la sociedad y para usos comerciales”, dijo.

Si nos adentramos en las especificaciones técnicas, vemos que este propulsor es de 2.0 litros y puede quemar amoníaco líquido de forma segura y efectiva produciendo 120 kW de electricidad. De esta manera, conseguirá, según datos que ha facilitado GAC, un 90% menos de emisiones de carbono que otros combustibles.

El amoniaco y su peligrosidad

La peligrosidad del amoniaco como compuesto para combustibles reduce su uso sustancialmente. De hecho, hoy en día sólo se utiliza en industrias como la de los camiones y el transporte marítimo. Esos sectores tienen una mejor infraestructura de seguridad para manejar los desafíos asociados con esta sustancia tóxica, que puede conllevar muchos problemas.

Aunque la compañía china que está experimentando con el amoniaco ya ha dado un primer paso para su implementación en coches, todavía falta mucho trabajo por hacer a nivel de investigación y desarrollo. El objetivo no es otro que superar la barrera de la peligrosidad para que este componente químico pueda servir en un futuro como alternativa a los motores eléctricos. 

Si buscamos posibles diferencias entre el combustible de hidrógeno, que ya se aplica en vehículos y el de amoniaco, veremos que el primero de ellos ofrece una mayor eficiencia energética, pero tiene desafíos significativos en términos de almacenamiento y transporte. El amoníaco, por otro lado, es más fácil de manejar, pero requiere procesos adicionales para liberar el hidrógeno contenido en él.