Elegir el peor coche de carreras de Fernando Alonso es fácil y a la vez difícil… porque lo cierto es que el piloto asturiano ha tenido que lidiar con varios coches de carreras ‘complicados’ durante sus últimos años en la Fórmula 1.

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Sin embargo, si hay uno que de verdad le trajo dolores de cabeza ese fue, sin duda alguna, el McLaren. O bueno, en general, los McLaren… pero como tenemos que escoger uno, iremos directamente a la unidad con la que empezó toda su odisea con los de Woking. 

Corría el año 2015 cuando Fernando Alonso dio el salto al equipo McLaren-Honda, donde compartiría equipo con Jenson Button, después de abandonar las filas de Ferrari. La entrada de Honda se veía como un soplo de aire fresco y la posibilidad de que McLaren volviera a lo más alto. 

De hecho, por aquel entonces, Alonso comentó esto: “He tenido varias conversaciones serias con todos los directivos de McLaren y Honda; he visitado sus fantásticas instalaciones tanto en Reino Unido como en Japón y tengo claro que la alianza de McLaren y Honda se convertirá en una unión de larga duración en la que se cosecharán muchos éxitos. Además, tengo la intención de darlo todo para ayudar a conseguirlo". Ejem, sí.

Es decir, que las expectativas eran altas... pero el globo empezaría a desinflarse mucho antes de lo esperado. El McLaren MP4-30, diseñado por Tim Goss y Peter Prodromoum, pronto daría síntomas de estar en baja forma. 

¿El peor coche de F1 de Alonso? Juzga tú mismo... 

Ese mismo año, en los test de pretemporada de Jerez y Barcelona, Button y Alonso tuvieron que ingeniárselas para lograr el mayor número de vueltas posible, sin mucho éxito.

Y aunque a veces las pretemporadas de F1 son engañosas, esta vez fueron un preludio de lo que estaba por llegar. Durante todo el año 2015 los problemas fueron una rutina para McLaren y Alonso, que se enfrentaba al peor coche de carreras de su historia. 

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Fallos en el KERS, sobrecalentamientos, problemas de motor, fallos hidráulicos, falta de potencia... es decir, graves problemas que desembocaban en continuos abandonos.

Por supuesto, tanto Alonso como Button se las apañaron para que, cuando el coche se lo permitía, poder arañar algunas posiciones y puntos para sí mismos y para el equipo. 

El asturiano logró ser quinto en su mejor puesto y acabó dos veces en zona de puntos (consiguiendo un total de 11 puntos al final de temporada). Abandonó hasta en 8 ocasiones y completó 9 grandes premios, lo que deja bien claro que fue una temporada para el olvido y un mal coche que trajo amargura y frustración a la carrera del asturiano.